Miembros de la familia de Pere A. Serra posan con la directora del Museu Es Baluard de Palma, Nekane Aramburu (sexta por la derecha), y los participantes en la mesa redonda en la que se recordó a la figura del homenajeado: los artistas Rafa Forteza, Pep Canyelles y Teresa Matas –quinto, sexto y séptima por la izquierda– y el galerista Joan Oliver ‘Maneu’ (cuarto por la derecha). | Teresa Ayuga

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Fue el «principal impulsor» de Es Baluard de Palma, movido por «su intensa pasión por el arte» y este jueves, este espacio para el arte moderno y contemporáneo homenajeó a quien fuera su presidente de honor, Pere A. Serra, hasta su fallecimiento en noviembre de 2018. El museo desveló, dentro de los actos de su 15 aniversario, la nueva museografía de su Sala 1, que alberga cerca de una veintena de obras de la Col·lecció d’Art Serra, que ‘conviven’ ahora con piezas procedentes de otros fondos para establecer un diálogo entre la creación artística de diferentes generaciones y movimientos. Alrededor de un centenar de personas asistieron a esta velada. Antes de la inauguración, el espacio organizó una mesa redonda a cargo de profesionales del sector.

El acto fue un reconocimiento a Serra, cuyo libro Memòries d’un museo. Diàlegs en Es Baluard, ejerce de punto de partida de la nueva museografía de la Sala 1, y en el que aparecen las obras más destacadas que la Fundació d Art Serra ha depositado en este museo. Muchas de ellas se exhiben en este renovado espacio.

La muestra se articula a partir de tres ejes, «paisaje, figura y abstracción», en palabras de la directora del museo, Nekane Aramburu, que sirven de hilos conductores de esta reordenación, fruto de un análisis que el área artística y de dirección de Es Baluard han trazado en torno a la colección, con una selección de sus obras más representativas. Así, por ejemplo, Torrent de Pareis, Mallorca, de Joaquim Mir, es un cuadro «esencial» para poder iniciar el análisis de lo que ha representado la pintura de paisaje en Mallorca.

Otras piezas clave, como las realizadas por Gelabert, Rusiñol, Anglada-Camarasa o Joaquín Sorolla, son un punto de inflexión para «aproximarse» y entender a un Miró incipiente que recrea su Paysage de Mont-roig, en 1916. También se muestran creaciones de Juli Ramis, Elmyr de Hory, André Masson, Roberto Matta, Hans Hartung o Rebecca Horn, así como una vitrina con diferentes libros, catálogos y otros objetos.

El acto atrajo a autoridades como Joana Català, directora general de Cultura del Govern; el regidor de Cultura de Cort, Llorenç Carrió; la coordinadora de este área, Francisca Niell, o los populares Biel Company o Mateo Isern, así como también a personalidades del mundo de la cultura, y también del tejido empresarial, como el presidente de Globalia, Juan José Hidalgo, entre muchos otros.

Previamente a la inauguración de la Sala 1, el auditorio del museo acogió una mesa redonda en la que participaron el galerista y comisario Joan Oliver ‘Maneu’ y los artistas Teresa Matas, Pep Canyelles y Rafa Forteza. Juntos, repasaron la historia del arte local, sus protagonistas y, sobre todo, recordaron momentos que vivieron junto a Pere A. Serra, cuya pasión por el arte «se echa mucho en falta», coincidieron.