Imagen de la bula imperial de Manuel II Paleólogo. | Catedral de Mallorca

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La Catedral de Mallorca y el Archivo Capitular de Mallorca han cedido temporalmente dos piezas únicas para una exposición que se inaugura el próximo lunes en Venecia: la bula imperial de Manuel II Paleólogo -un pergamino de 1402- y una reliquia de la túnica sagrada de Jesucristo en su relicario.

La exposición «Los últimos días de Bizancio. Esplendor y decadencia de un imperio «, organizada conjuntamente por el Museo Diocesano de Freising (Alemania) y la Biblioteca Nazionale Marciana de Venecia (Italia), se inaugura el lunes y se podrá visitar hasta el 5 de marzo de 2019, ha informado la Catedral de Mallorca en un comunicado.

Se trata de dos piezas que han sido seleccionadas por los comisarios de la exposición y solicitadas expresamente a la Catedral por su valor patrimonial y cultural y con la intención de que su presencia enriquezca el discurso museológico programado.

El Archivo Capitular de Mallorca cede temporalmente para la exposición una pieza única, tanto por su valor como patrimonio documental como por la riquísima calidad de sus materiales: la bula imperial de Manuel II Paleólogo.

Este pergamino del 1402 es un testimonio de las relaciones diplomáticas internacionales del Emperador bizantino Manuel II y destaca por su gran sello o bula de oro colgando del cordón de seda, que demuestra la autenticidad.

En el documento, Manuel Paleólogo hace entrega de la reliquia de la túnica sagrada de Jesucristo para protegerla de los ataques turcos que perturbaban a Constantinopla en el siglo XV.

El Museo Capitular de Mallorca también cede temporalmente para la exposición de Venecia la reliquia de la túnica que acompaña la bula de oro.

Con unas dimensiones de 76 por 29'5 centímetros, el relicario gótico que custodia el fragmento de la túnica está concebido como un templo arquitectónico con pilares, arbotantes, barandillas caladas y gárgolas. Está sostenido por un gran pie en el que se encuentra una representación de la Virgen sosteniendo en su mano izquierda al niño Jesús, en actitud de abrazarla, mientras que con la mano derecha sujeta una flor.
Con esta iniciativa, el departamento de cultura de la Catedral de Mallorca mantiene su compromiso de colaboración internacional a través de la política de préstamo de sus obras.