Francisco Copado se enfrenta a grandes retos de gestión al frente de la Fundació Miró. | Joan Torres

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Tras presentar su primera exposición del fondo de la Fundació Pilar i Joan Miró sobre los procesos creativos del artista, al nuevo director de la entidad, Francisco Copado, le queda por delante una ingente labor de gestión que pasa por ampliar la plantilla, recuperar plazas que no se habían cubierto, retomar la restauración de Son Boter, arreglar los problemas que causa a la infraestructura la ‘piscina’ de agua de la cubierta, definir cuáles y por qué serán las actividades que dinamicen la fundación, crear una nueva página web, renovar el funcionamiento del departamento educativo y de los talleres de obra gráfica, «marcar unas líneas claras sobre dónde queremos ir»... y, sobre todo, acercar la fundación al público local. Para Sant Joan ha organizado talleres sobre las titelles que coleccionaba Miró.

Todo ello sin dejar de poner en valor la obra de Miró de la que dispone la fundación con exposiciones en la Sala Estrella y el Espai Zero, pues el Cúbic lo dedicará a exhibir los trabajos de los talleres de obra gráfica. De momento, para el 25 aniversario mostrará un «Miró nunca visto aquí y trabajaremos el tema del coleccionismo» y en 2018 expondrá «Miró y la influencia de oriente, que nunca se ha trabajado aquí».

Copado explica que cuando llegó al cargo «no había nada programado» para el propio centro». En el plano internacional, los días 26 y 27 de este mes «se inaugurará en Corea la primera exposición que se hace allí de Miró, una muestra excepcional, un proyecto que nos encontramos y que trabajamos hasta darle casi la vuelta». En casa también anuncia que podrá en marcha «un proyecto de creación contemporánea ligado a Miró y a los procesos creativos, que expondremos en la Nit de l’Art, pero para este año ya no llegamos».