La sala Es Gremi de Palma acogió un debate sobre el día sin música. | Jaume Morey

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En Mallorca, y el resto de España, se reivindicó este miércoles por primera vez una jornada sin conciertos en el llamado Día sin Música, un grito silencioso convocado por promotores y propietarios de salas de música en vivo y apoyado por artistas, ciudadanos y partidos políticos, en contra de que este sector tribute un IVA «de lujo».

El lugar de las notas y los acordes lo han tomado las 225.000 firmas que se unieron a esta iniciativa y que quedaron registradas en el Congreso de los Diputados, para reclamar al Gobierno que deshaga la subida que acometió hace casi tres años, cuando pasó del 8 al 21 por ciento, y, en compensación, lo fije en el tipo superreducido.

En la Isla, artistas, promotoras, salas de concierto y tiendas de discos se han sumado a la queja, sobre todo en las redes sociales, donde el hashtag #undiasinmusica lideró el trending topic a lo largo del día. Músicos como Tomeu Penya, Chenoa o el grupo Val 9 colgaron fotografías en Twitter apoyando esta causa; también desde el Auditòrium de Palma, que proyectó el lema de la jornada en su plasma publicitario; el Grup Trui o la sala Es Gremi, que acogió una mesa redonda para debatir sobre este asunto.

«Indignado» ante el IVA cultural y la actual situación de la música se mostró Juan Campos, de Discos Oh!. «Los más perjudicados son los amantes de la música; a los profesionales nos han matado».