Macaco posó ayer para este periódico en el Bar Flexas de Palma.

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A Macaco, al principio, los grandes medios de comunicación nacionales no le querían. Ha crecido aupado por el boca oído del público, que ha evolucionado desde sus inicios. «El boca oído se convirtió en una bola muy grande, estaba en todos los festivales, en los bares, en las discotecas...», sostiene el artista, que presenta El murmullo del fuego hoy, a las 20.30, en la discoteca BCM de Magalluf.

Él asume que ser obviado por las radios en sus inicios es algo que ocurre en casi todas las disciplinas. Macaco sabe que ha evolucionado de forma natural antes de obtener el apoyo mediático. Esa naturalidad se fundamenta en los murmullos de la gente. «Soy un músico que he crecido por el boca oído y cuando la gente se junta, ese proceso se convierte en un gran fuego que se puede utilizar para quemar lastres, las cosas que ya no nos interesan». A partir de ese fuego ilumina su camino. «Es la película que yo me he montado», reconoce el autor de éxitos como Mamá Tierra , Con la mano levantá o Moving . En el disco Macaco incluye una introducción de Saramago y menciona a Isaac Newton. «Me gusta extrapolar aspectos científicos y llevarlos a mi mundo, como Jorge Drexler», apunta.

Macaco. Esta noche, en BCM (Magalluf). A las 20.30 horas.