La formación El Columpio Asesino, en una imagen promocional.

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Adelantando a otros obreros de la escena por la vía del rock intenso y dramático, El Columpio Asesino ha coronado un nuevo 'ochomil' con Diamantes (2011), un disco que rezuma pasión y belleza, y juega a combinar el negro con todas las gamas imaginables de grises. El quinteto navarro actuará esta noche en la sala Cultura Club, a las 23.00.

Nacidos al abrigo de la escena indie, no tardaron en configurar un discurso propio e identificable gracias a una inteligente combinación de rock y electrónica, bazas presentes en temas como La marca en nuestra frente es la de Caín o Yo soy tu nombre . Ritmos que se entregan a una estética ténebre de ritmos impetuosos, percusiones juguetonas, ambientes de verbena crepuscular y teclados perturbadores, un collage multicultural que genera dudas acerca de si estamos ante algo inocente o ambicioso; superficial o repleto de ironía... En cualquier caso, se trata de una formidable colección de canciones de huella profunda, un caleidoscopio de sensaciones con algo de monumento conmemorativo a lo cotidiano. Una retahila de auténticos chispazos de clarividencia sumados al latido que todo lo cura e imágenes poéticas que dan sentido a lo inexplicable. En la gloria, vamos.