Fernando Gilet, regidor de Cultura de Cort. | Teresa Ayuga

TW
2

Los miembros del patronato de la Fundació Teatre del Mar de Ciutat se reunirán a primeros del próximo mes de septiembre para tratar su «viabilidad y continuidad». Este diario ha podido saber que existe la posibilidad de que uno de sus patronos vitalicios, el Ajuntament de Palma, abandone su silla del patronato del espacio escénico del Molinar, un hecho que implicaría el cese de su aportación económica y la «liquidación y cierre del teatro».

El regidor de Cultura de Cort, Fernando Gilet, confirmó ayer a este periódico que «esta posibilidad está sobre la mesa, al igual que lo está una posible continuidad». De momento no hay nada decidido, aunque Gilet aclara: «Es una situación pendiente de resolver. Nosotros hemos manifestado estudiar la situación respecto a los tiempos que corren y lo que significa aportar una cuantía económica a un espacio privado tendiendo en cuenta que Cort tiene tres teatros municipales que programar y sacar adelante. La decisión todavía no se han tomado ni está clara».

Una hipotética salida de Cort del patronato de la fundación significaría «un inmienente cierre y liquidación del espacio», apunta Carles Molinet, del Teatre del Mar. «Sin la aportación de las instituciones -Cort, Govern y Consell- no podemos salir adelante». Además, «la marcha de Cort conllevaría, por lógica, la del Govern y la del Consell», sostiene Molinet, quien presentará un nuevo modelo de gestión en la reunión de septiembre por el que las cuentas quedarían así: un 33 por ciento lo aportaría el público; otro 33 por ciento el patrocinio privado y el 33 por ciento restante las instituciones.

«Ya en la última reunión del patronato, en mayo, mostraron reticencias a comprometerse», recuerda Molinet, quien insiste en «la necesidad de reunirse en un debate sin enfrentamientos. Si el Teatre del Mar no es realmente viable, se cerrará».