Las trabajadoras del Espai Mallorca llevan casi medio año sin cobrar. | Carles Domènec

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Los representantes del Gremi d'Editors y del Espai Mallorca han sido convocados a un acto de conciliación el 17 de enero en Barcelona para llegar a un acuerdo y evitar un juicio, tras la demanda que el espacio barcelonés acaba de interponer contra el Gremi por incumplimiento de contrato. El motivo es que las cuatro empleadas, dos libreras y dos gestoras culturales, llevan cinco meses sin cobrar. «La situación es insostenible y no hemos tenido otra opción que poner la demanda», dijo ayer Amanda Vich.

La directora del Espai Mallorca explicó que «vivimos en una constante incertidumbre sin saber cuándo cobraremos, algo que no parece saber ni el Consell ni el Gremi, y los meses van pasando». Vich aclaró que «la demanda se debe a que el Gremi incumple continuamente el contrato», y especificó que, «en los últimos dos años, el promedio de retraso en el pago es de 25 días y hemos tenido mucha paciencia». Vich añadió que «no queremos perder el trabajo porque nos gusta mucho, pero hace falta una solución», y asumió que «nos sentimos en tierra de nadie ya que las instituciones se van pasando la pelota».

A causa de la demanda, cuya notificación llegó a manos del Gremi el lunes, su presidente, Miquel Ferrer, expuso que «el tema está en manos de nuestros abogados, que lo están estudiando», y precisó que «el problema es del Consell de Mallorca, no nos encontraríamos en esta situación si hubiera pagado cuando tocaba».

Ferrer se reunió ayer con representantes del Gremi. «Hemos informado al Consell de la reunión, pero no al Govern porque este año no nos han dado subvención», y reiteró que «si el Consell paga antes del día 17, el problema se solucionará».

IEB

El presupuesto del Espai Mallorca, gestionado por el Gremi d'Editors, cuenta con 250.000 euros del Consell de Mallorca y 30.000 de la Generalitat de Catalunya. En 2011 el Govern dejó de participar con 30.000 euros. Ante la posibilidad de que este año el Espai Mallorca pase, de forma mayoritaria, a manos del Govern, Ferrer recalcó que «el Institut d'Estudis Baleàrics (IEB) era una posibilidad, pero no sé si esta demanda puede afectar negativamente».

En ese sentido, el presidente del IEB, Cristòfol Vidal, recordó que «el Espai Mallorca depende casi exclusivamente del Consell de Mallorca y parece que tiene intención de solucionar esta situación» y puntualizó que «si otras instituciones quieren entrar en el Espai Mallorca, que ahora mismo sigue vivo, se ha de hablar con calma y realizar una serie de reuniones y gestiones». Vidal mantuvo que «es importante que el Espai Mallorca siga porque es una ventana abierta al exterior para Mallorca y, en general, para Balears», y negó «tener más información».