Los impulsores de la percusión en España se hacen oír en el Conservatori

Primero actuaron los estudiantes y, a las 20.00, Lorente interpretó Saturno , una obra compuesta por Juanjo Guillem, donde se sintió la estética de la música contemporánea, y continuó con una bulería de improvisación, una propuesta más popular. Los grupos Amores y Neopercusión se sumaron a la fiesta con una suit basada en la música de Frank Zappa y rindieron un pequeño homenaje a Astor Piazzola, con piezas que enfatizaron la idea de la libertad. El evento concluyó con una jam session en la Cervecería de s'Escorxador.

Hace 21 años, el músico Armando Lorente introdujo la percusión en Mallorca, con la ayuda de Juanjo Guillem, miembro de Neopercusión, y 'Chapi', fundador de Amores. «Somos casi una familia», asegura Lorente, quien explica: «Hemos conseguido crear una escuela de percusión con un nivel considerable. La prueba es que los alumnos que hemos tenido han conseguido buenas plazas en orquestas tanto nacionales como internacionales. Así, hemos convertido a Mallorca en uno de los referentes de la percusión en España y eso provoca que muchos estudiantes quieran venir a formarse aquí».

Durante estos años, han trabajado «para cambiar los arcaicos conocimientos que había de la percusión por algo más actual», expuso Guillem. «Nuestro instrumento, como solista, nació a mediados de los años 30 del siglo XX y ya hay muchas tendencias en percusión, pero nosotros trabajamos la música de vanguardia clásica», expuso.

Recortes

El departamento de percusión del Conservatori ya ha notado los recortes, al perder una plaza del alumnado «para ahorrar» y otra de profesor. A Armando Lorente, hasta hace un mes profesor del centro, no le han permitido compatibilizar su trabajo en la Simfònica con la docencia. Es por ello que al departamento le inquieta que «peligre el nivel y la calidad de la enseñanza», expuso 'Chapi'. «Es preocupante que tras 25 años de pelear por la percusión, nos toque volver a empezar», lamentaron los músicos. También hay riesgo de que el próximo año no se pueda realizar el encuentro, porque «está en peligro».