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Margalida Moner quiere reflotar el barco del Teatre Principal de Palma. Para ello, la nueva directora gerente dice que antes «hay que pagar lo que se debe». Suspenderá las subvenciones de 2011, abrirá el escenario a las compañías no profesionales y preparará las programaciones con tiempo para darles mayor difusión. Ese «nuevo reto» que pidió capitanear a su partido no le impedirá seguir cantando, su pasión junto al teatro. Moner quiere «hacerlo bien», aunque por el camino la critiquen.

-Parte del sector teatral no está contento con su nombramiento.
-Opiniones de la gente. Pero para hablar de mi trabajo, que esperen a que haya hecho algo.

-Piensan que no da el perfil...
-¿Y el que ha estado aquí ahora qué perfil tenía? Lo que hay hoy está producido por alguien y ¿dónde estaban los que ahora se quejan? Para un director no vale un único perfil. Tiene que saber trabajar en equipo, y tiene que contar con un grupo de asesores. Por otra parte, también tiene que ser un buen gestor.

-¿Cómo será su equipo?
-Estudiamos una reducción de plantilla. Está sobredimensionada. Me rodearé de personas que me puedan ayudar a que el Principal vuelva a tener la importancia que tenía antes.

-¿Cómo lo gestionará?
-Tenemos que abrir el teatro a todo el mundo. Hasta ahora no ha hecho esta función.

-Esto lo ha dicho en otras ocasiones, ¿qué significa?
-Hay gente que sabe hacer cosas y nunca ha tenido la oportunidad de subir al escenario del Principal. ¿Por qué?

-¿Compañías profesionales?
-Y no profesionales. Sin quitar la programación propia del teatro, tenemos que dar oportunidad a toda la gente que sabe hacer cualquier cosa digna. El teatro también es el hobby de mucha gente y actuar en el Principal para ellos es una gran oportunidad.

-¿No cree que el Principal tiene que ser el teatro de referencia de la comunidad, como lo es el Teatre Nacional de Catalunya?
-Por supuesto que habrá una línea de trabajo y tampoco vendrá cualquier cosa que se puede ver en la plaza de un pueblo. Se trata de que unas semanas o unos días se pueda programar a esas compañías.

-¿Abierto a todos y qué más?
-Mantendremos la programación firmada hasta final de diciembre. En octubre deberíamos tener el programa de 2012 parar promocionarlo. La Temporada d'Òpera está asegurada. Hemos pedido subvenciones al Ministerio de Cultura, y buscaremos otras ayudas. Me gustaría pontenciar la zarzuela y el teatro clásico. Hay que dar uso a nuestros recursos, no se entiende que teniendo producciones propias muertas de risa en una nave del polígono, se tenga que alquilar en Italia el montaje de la ópera.

-¿Pueden pagar la programación ya contratada?
-Tendré que preguntarles si siguen o no con el contrato porque no podrán cobrar por ahora. No voy a engañar a nadie y hay que aclararlo antes.

-Más allá del embargo, ¿cuál es la situación del teatro?
-Mala. Se debe casi 1,5 millones de euros a proveedores. Al final de año podrían ser unos dos.

-¿Dejarán de depender del presupuesto del teatro las ayudas al circuito teatral?
-Es algo que ya he llevado a la Dirección Insular de Cultura, era lo lógico. Por otra parte, este año habrá una pausa en las subvenciones, están convocadas y se desconvocarán. No puede ser que debamos tanto dinero y carguemos con más.

-¿Cómo le ofrecieron el teatro?
-Me vinieron a buscar para ayudar a mi partido. Llevaba cuatro años de inactividad. Yo pedí la dirección del teatro. Dije que si ganábamos, me gustaría ser la gerente.

-¿Denunciarán las deficiencias en las obras de reforma?
-Lo primero que tenemos que hacer es pagar. Este asunto estuvo guardado en un cajón y ahora ha venido un juez a decirnos que en febrero se llegó a un acuerdo de pago y se ha incumplido. No se entiende que alguien ante un juez asumiera ese compromiso sin consultar a Intervención. Además, se firmó el final de obra sin denunciar las deficiencias y se devolvieron los avales.

-Entre 2005 y 2007, durante la ejecución de la obra, alguien tuvo que ver las deficiencias.
-Yo me hubiera dado cuenta.

-Reconoce que el problema parte de la ejecución de la obra.
-Ha sido un cúmulo de despropósitos. Revisaremos el proyecto, hablaremos con la empresa y si tenemos que ir al juzgado, iremos. Tendremos que ver si ha prescrito.