La artista Teresa Matas, ayer en Palma.

TW
0

«La naturaleza es nacimiento, vida y muerte». Con esta premisa, Teresa Matas ha dado forma a las piezas que conforman El jardí , su nueva exposición que se inaugura hoy, a las 19.30 horas, en la galería Lluc Fluxà de Palma (Can Ribera, 4). Su «amor» por la vegetación ha empujado a la artista a dar forma a su «pequeño paraíso», que se podrá ver hasta el 22 de julio.

«Cuando empiezo a trabajar nunca sé lo qué va a pasar», confiesa la artista, quien ha cambiado de estudio -ha traslado su lugar de trabajo al jardín de su casa en el campo- tras un acontecimiento personal «que me ha marcado», subraya. «Este cambio de ubicación no ha hecho que cambie la forma en la que trabajo. Mis obras nacen de la introspección, de mi interior», añade.

Matas ha recreado un ambiente muy naturalista a través de unas piezas realizadas con materiales como el papel y la tela. «Me gusta trabajar con telas, pero deben ser viejas, deben tener unas vivencias detrás», explica. «Me encanta crear nuevas formas y, en esta ocasión, he cosido papel sobre la tela. Durante el proceso de creación, algunas partes se han roto, pero eso le da un toque más real, más vivo», detalla. El color rojo, el blanco y el negro predominan en El jardí , un espacio «imaginario» en el que destacan piezas como varios murales de gran formato, una instalación que simula «el vuelo de las mariposas; un lago», que ha logrado con la inclusión de láminas de cristal en el suelo, o una videoproyección realizada en el año 2002 por su propio hijo.

«Me atrae la vegetación espesa y la belleza que desprende. Me permite expresar lo que siento», concluye.