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Son muchos los artistas que han querido contribuir en el enriquecimiento del fondo del museo modernista Can Prunera, desde su inauguración el pasado agosto, mediante la donación de obras. Ayer fueron diez las obras que entregaron los mismos artistas, muchos de ellos mallorquines, a los responsables del centro. Así, cuatro esculturas y seis cuadros más pasan a formar parte de la colección del casal modernista ofrece a los visitantes.
Pere A. Serra, presidente de la Fundación Tren de l'Art, quiso agradecer a los artistas, a algunos de los cuales le une una antigua amistad, su «generosidad» y destacó su reconocida trayectoria.
La donación se inició en el salón de actos del museo, donde se hizo la entrega de los cuadros, y continuó en el jardín, donde se han instalado las cuatro nuevas piezas escultóricas.
Diez nuevas obras
Christian Karis donó su obra Can Prunera, una pintura de técnica mixta que hace unos meses formó parte de su muestra dedicada a Sóller en el centro. A continuación, Andrés Barceló hizo entrega de su obra Estación de Sóller, que pintó en 1976. Por su parte, el artista solleric Miquel Àngel Bernat entregó una de sus piezas, caracterizada por una estética cercana al pop art. Rafael Canyellas, quien combina su faceta artística con su labor en la Escola de Disseny de les Illes Balears, donó Cine Rialto, y Antoni Crespí Sbert regaló su paisaje de Cala Sant Vicenç. El acto finalizó con la donación de las pinturas de Magdalena Nicolau, también sollerica y artista de largo recorrido, quien entregó una delicada acuarela en la que destaca la suavidad de sus formas.
Tras la donación de los cuadros, el acto continuó en el jardín, donde ayer lucía un sol espléndido. Allí se presentaron las cuatro nuevas esculturas. La primera fue la de Joan Cunill, artista formado en la artesanía del hierro en Sóller, nombrada Escalera de la vida, y realizada en aceros corten e inoxidable. En estos materiales también ha creado la obra Lola dos el artista mallorquín de raíces uruguayas Martín Mas. Dicha pieza ha sido cedida por Pere A. Serra, así como Rayuela, del artista persa Rafael Mahdavi. Por último, el acto terminó con la entrega de la pieza Ansias de libertad, del reconocido escultor Jaume Mir, en la que reelaboró el mito clásico de Ícaro.