El 51,7 por ciento de los valencianos afirma sufrir molestias visuales relacionadas con el uso intensivo de pantallas, como dolor de cabeza, sequedad ocular, visión borrosa o incluso doble, según el Barómetro de la Salud Visual de la Comunitat Valenciana 2025, elaborado por el Colegio de Ópticos-Optometristas de la Comunitat Valenciana (COOCV) en colaboración con la Sociedad de Optometría y Contactología de la Comunidad Valenciana (SOCCV).
De acuerdo con la entidad colegial, los datos son «contundentes»: el 27,7% de la población pasa más de ocho horas al día frente a una pantalla, el 34,8% entre cuatro y ocho horas, y un 33,9% entre dos y cuatro horas. Esta «sobreexposición» afecta no solo a la salud visual sino también al rendimiento laboral o académico del 49,4% de los encuestados.
Además, el 66,1% considera que su entorno de trabajo perjudica a su visión, y el 63,5% afirma no haber recibido recomendaciones específicas para protegerla.
El presidente del COOCV, Andrés Gené Sampedro, ha recalcado que esta es «una realidad que no podemos ignorar. El uso masivo de pantallas se ha normalizado, pero sus efectos sobre la salud visual están siendo pasados por alto».
«Desde el COOCV insistimos en la necesidad de incorporar buenos hábitos visuales y revisiones periódicas con el óptico-optometrista, especialmente en la infancia y adolescencia. Cuidar de nuestros ojos es cuidar de nuestra calidad de vida», ha advertido.
Síndrome visual digital
El uso prolongado de pantallas está detrás del llamado Síndrome Visual Digital, una afección relacionada con la fatiga visual, que engloba síntomas como picor de ojos, visión borrosa, dolor de cabeza, y tensión en cuello y espalda. Si alguna persona presenta habitualmente dos o más de estas molestias puede que lo esté experimentando.
Para mitigar estos efectos, los especialistas recomiendan aplicar la regla «20-20-lejos»: cada 20 minutos frente a una pantalla, mirar a lo lejos durante al menos 20 segundos. Además, se aconseja hacer pausas más largas cada dos horas y mantener una frecuencia de 20 parpadeos por minuto para evitar la sequedad ocular.
El aumento del uso de dispositivos electrónicos en edades tempranas preocupa «especialmente» a los profesionales de la visión. La falta de actividades al aire libre y la exposición prolongada en distancias próximas a pantallas afecta al desarrollo del sistema visual de niños y adolescentes, en una etapa «clave» de su crecimiento y desarrollo.
Ante esta situación, la entidad colegial subraya que es «más necesario que nunca que niños y adolescentes se realicen un completo análisis visual que permitirá que el óptico-optometrista compruebe la agudeza visual en ambos ojos, si necesita la compensación de algún defecto refractivo y, además, valorará el correcto funcionamiento del sistema acomodativo, vergencial y de los movimientos oculares, aspectos fundamentales que pueden afectar al rendimiento escolar».
Desde el COOCV se recuerda la importancia de realizar revisiones visuales periódicas para detectar posibles alteraciones visuales que puedan impactar en el rendimiento escolar.
Para hacer un uso saludable de las pantallas electrónicas en cualquier etapa de la vida, es fundamental adoptar una serie de buenos hábitos visuales: se recomienda realizar pausas regulares, como cada 20 minutos, mirar durante 20 segundos a un punto lejano, o bien descansar 10 minutos cada 40 minutos de uso continuado, especialmente en niños y adolescentes.
Asimismo, es importante mantener una distancia mínima entre los ojos y la pantalla de entre 40 y 60 centímetros, y procurar que esta se sitúe a la altura de los ojos. El entorno también debe ser adecuado: la estancia debe estar bien ventilada, con iluminación natural siempre que sea posible, evitando reflejos, sombras o contraluces fuertes.
El mobiliario debe facilitar una postura ergonómica, con una mesa preferiblemente inclinada entre 20 y 30 grados y una silla que permita mantener la espalda recta y los pies apoyados en el suelo. Además, se aconseja ajustar el brillo, contraste y tamaño del texto en los dispositivos, usar filtros si fuera necesario, y procurar parpadear con frecuencia para mantener la hidratación ocular.
"tendencia preocupante"
Por su parte, Rafael Pérez Cambrodí, presidente de la SOCCV, ha indicado que los datos del Barómetro 2025 reflejan una «tendencia preocupante, pero también una oportunidad: la de educar a la población en el uso saludable de la tecnología».
«Como optometristas, no solo corregimos problemas visuales, también tenemos la responsabilidad de prevenirlos con formación, orientación y una atención personalizada adaptada a las necesidades visuales del día a día», ha afirmado.
A pesar de la falta de información generalizada, el 75,3% de la población encuestada asegura tomar alguna medida de protección visual, como descansos periódicos (58%), el uso de filtros de luz azul (26,2%), pantallas con filtro antirreflejante (22,1%) o incluso el uso de lágrimas artificiales (0,3%).
Algunas de estas alternativas tienen una «gran eficacia» demostrada en cuanto a la reducción de la sintomatología mientras que otras se han puesto «en cuestión», por lo que aconsejan consultar a los óptico-optometristas para una información veraz.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.