La investigación se inició el 4 de noviembre de 2022, a raíz de una denuncia interpuesta en sede policial por una de las víctimas, quien puso en conocimiento de los agentes los hechos que venía sufriendo. En esa denuncia relató que hasta altas horas de la madrugada recibía de forma continúa numerosos mensajes de contenido sexual.
Los agentes especializados pusieron en marcha una ardua investigación en la que todas las víctimas, menores de edad, confluyeron en una misma versión de los hechos.
Tras el análisis de las diferentes pruebas aportadas al caso por las diferentes víctimas se consiguió identificar plenamente a los ahora detenidos, que actuaban de forma conjunta y cada uno de ellos tenía un papel bien definido.
La persona menor de edad detenida tenía una función clave, siendo quién seleccionaba a las menores en las redes sociales y les invitaba a participar en los chat privados.
Si accedían a compartir contenido gráfico de carácter sexual se les ofrecía una prestación económica, si bien a las víctimas nunca les llegaba ese dinero, sino que era la persona menor detenida quien lo recibía, además de remitir el material obtenido a los dos varones detenidos.
Por todo ello, y una vez identificados los autores adultos, ambos hermanos se llevó a cabo una entrada y registro en el que se intervino diverso material informático y se procedió a su detención siendo puestos a disposición judicial.
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