Archivo - Una pareja se abraza mientras llueve en València (8 febrero 2023) | Rober Solsona - Europa Press - Archivo

TW
0

La Comunitat Valenciana ha vivido un invierno seco y cálido con el mes de diciembre más caluroso desde que hay registros. La temperatura media ha sido 9 ºC que es 0,4 ºC superior a la del promedio normal (8,6 ºC) y la precipitación media --78,7 l/m2-- fue un 37 % inferior que la del promedio climático del periodo 1991-2020 (125.1 l/m2). En concreto, el invierno 2022-2023 es el trigésimo más cálido y el vigésimo cuarto más seco desde 1950.

El carácter cálido se debe a las anómalas temperatura de la primera mitad de la estación y, de hecho, diciembre fue el más cálido desde que hay registros. Esta anomalía cálida no llegó a ser compensada por el frío de final de enero y de febrero, que fue el mes con la anomalía fría más destacada de los últimos cinco años, según detalla la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en su resumen del trimestre.

Desde Aemet recalcan que «no hay precedentes de un mes de diciembre tan cálido como el de 2022 en la Comunitat Valenciana». Muchos observatorios superaron su récord histórico de temperatura media mensual, entre ellos los de los observatorios de Castelló de la Plana, Alicante y València, los tres con más de cien años de datos. Los valores más altos del invierno se registraron los días de Nochebuena y Navidad: Xàtiva, 26,5 ºC; Pego, 25,9; Carcaixent, 25,3; València y Novelda, 25,2.

Enero, por su parte, fue un mes de grandes contrastes entre la primera y la segunda mitad y entre los días y las noches, pero al hacer la media con todos los datos, la temperatura media del mes ha sido igual a la del promedio normal. Las temperaturas más bajas del invierno se registraron durante la última decena de este mes: -10.0 ºC se registró el día 24 en el pico Gavilán, en la Puebla de San Miguel; -9.0 el día 22 en Fontanars dels Alforins; -8.6 el día 30 en Ademuz y -8.5 ese mismo día en Vilafranca.

Febrero fue el mes con la anomalía fría más acusada desde febrero de 2018. Durante los últimos días de este mes se produjo el segundo pico frío del invierno, de forma que el día 27 de febrero fue, junto con el 24 de enero, el día más frío del invierno 2022-2023 y de los dos últimos años en la Comunitat Valenciana.

La irrupción del aire frío de estos últimos días de febrero fue debida a la segunda borrasca mediterránea que afectó a nuestro territorio este mes, la borrasca Juliette, que introdujo una masa de aire polar continental, que a nuestro territorio llegó muy seca, por lo que lo más significativo fue el brusco descenso térmico, ya que apenas hubo precipitaciones.

En cuanto a las lluvias, lo más significativo se produjo al principio del trimestre y los días 7 y 8 de febrero, cuando además de la lluvia hubo nevadas en el interior norte de Castellón, con un espesor de nieve que, en general, osciló entre 15 y 20 cm en la comarca castellonense de Els Ports y zonas altas de comarcas cercanas.

En función a la precipitación normal en cada punto, el invierno ha sido muy seco en el 17% del territorio, que se sitúa principalmente en el sur e interior de la provincia de Alicante, seco en el 61%, húmedo o muy húmedo en el 6%, correspondiente a zonas del Rincón de Ademuz, la Marina Alta y sierras de la Safor y normal en el resto.

Nieve

Aunque en enero las precipitaciones fueron muy escasas, el día 29 de se produjeron acumulados significativos en el litoral sur de Valencia y norte de Alicante, con nieve por encima de 500 metros en las montañas de estas zonas.

En diciembre las precipitaciones más importantes se registraron los días 1 y 2 en los litorales y zonas llanas del prelitoral de Valencia y en la Marina Alta. El día 1 se llegaron a registrar 96.3 l/m2 en la Casella (Alzira) y 77.7 en Polinyà de Xúquer y el día 2 se registraron 100.0 en Gata de Gorgos, 98.6 en Parcent, 87.8 en el Montgó (Xàbia), 84.5 en Xàbia/Jávea y 82.3 en Orba.

Fuera del trimestre invernal, la primera quincena de marzo ha sido muy seca.

Los valores máximos de precipitación en el trimestre se han registrado cerca de las montañas litorales de la Marina Alta y la Safor. En la Fontilles (la Vall de Laguar) se han acumulado 320.5 l/m2; en Parcent, 306.8; en la Drova, 302.6 y en Barx, 292.4. En el otro extremo, en localidades del Vinalopó de l'Alacantí y del Camp de Túria, el acumulado durante el invierno 2022-2023 es inferior a 25 l/m2.