El Departamento vasco de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente concede ayudas a los puertos pesqueros, lugares de desembarque, lonjas y fondeaderos, con el objeto de mejorar la calidad e incrementar el control y la trazabilidad de los productos desembarcados, así como aumentar la eficiencia energética.
Con estas subvenciones, que ya pueden ser solicitadas, se busca también contribuir a la protección del medio ambiente y mejorar las condiciones de trabajo y seguridad de los pescadores, además de favorecer el cumplimiento de desembarque de todas las capturas de acuerdo con las nuevas exigencias de la Política Pesquera Comunitaria.
La convocatoria de ayudas, a la que ha tenido acceso Europa Press, precisa que se podrán conceder éstas a las inversiones que mejoren las infraestructuras de los puertos pesqueros, las lonjas, los lugares de desembarque y los fondeaderos; las inversiones en construcción o modernización de fondeaderos; y a las inversiones para aumentar el valor de los componentes infrautilizados de las capturas. En ningún caso será subvencionables la construcción de nuevos puertos, lugares de desembarque o nuevas lonjas.
Podrán ser beneficiarios de estas ayudas los pescadores o propietarios de buques pesqueros, incluidas las comunidades de bienes, y las inversiones y gastos subvencionables deben realizarse en el ámbito territorial de Euskadi o en buques pesqueros con puerto base en esta Comunidad Autónoma. Este programa de ayudas también esta destinado al sector acuícola.
En el supuesto de personas físicas, éstas deberán tener vecindad administrativa en el País Vasco en el año anterior, y de forma ininterrumpida, al momento de la solicitud de la ayuda, salvo lo establecido en cada línea de ayuda.
En el supuesto de personas jurídicas, su sede social deberá radicar en el ámbito territorial del País Vasco. Las inversiones y gastos subvencionables no podrán estar comenzados en el momento de presentar la solicitud de ayuda. En aquellos supuestos en los que el objeto de la inspección no se encuentre localizado dentro de la Comunidad Autónoma del País Vasco, se aceptará como acta previa el informe realizado por una Sociedad de Clasificación reconocida.
Las inversiones no deben conllevar efectos negativos significativos sobre el medio ambiente y los solicitantes de las subvenciones no podrán tener la residencia fiscal en un país o territorio calificado reglamentariamente como «paraíso fiscal».
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