El pasado día 4 de febrero, los agentes recibieron el aviso de una riña «tumultuaria» que se estaba produciendo en una céntrica plaza del municipio tras la sustracción de un coche que se encontraba con el motar arrancado u dos menores en el interior del tursimo, según informa la Policía Nacional en una nota de prensa.
Los menores son el hijo y el sobrino del propietario del coche, que al ver cóomo era robado, con los menores en su interior, «salió corriendo con gritos desesperados». El conductor que circulaba delante del vehículo sustraído, pudo oír las voces de los niños, que también estaban pidiendo auxilio y decidió parar su coche para impedirle continuar con su huida.
De este modo, la víctima pudo darle alcance e impedir que el autor del robo emprediera de nuevo la huida. «Ello derivó en un forcejeo entre víctima y ladrón, que culminó a su vez en un tumulto de vecinos que acudieron al lugar para auxiliar y tranquilizar a las víctimas».
Tras una rápida intervención de los agentes y gracias a la información recabada, lograron identificar al conductor, que fue acusado de un delito de robo de vehículo y detención ilegal y puesto a disposición judicial el pasado día 6 de febrero.
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