La periodista cultural y docente Gemma Ventura en Barcelona | Europa Press - EUROPA PRESS

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La periodista cultural y docente Gemma Ventura hace un homenaje a lo invisible en su primera novela, 'La llei de l'hivern' (Destino), con la que se alzó con el 55 Premi Josep Pla: «La imaginación es la cualidad humana más importante».

En una entrevista de Europa Press, Ventura (El Vendrell, 1990) ha explicado que la historia empieza con una joven que vela a su abuelo con la memoria y la imaginación como compañeras en plena soledad, y reflexiona acerca del sentido de la vida y «baja al subterráneo de ella misma».

«Lo invisible es lo más poderoso que tenemos», ha reivindicado la autora, que con un aire intimista y mágico, también ahonda en la novela acerca del saber dejar ir, la gestión del abandono, el suplantar las ausencias y el querer desde la distancia.

"el mundo interior", su mayor interés

La figura del abuelo le ha servido para ahondar «en el mundo interior de cada uno», que es lo que más interés le suscita porque alberga todo lo invisible, desde la bondad hasta la envidia, el odio y la esperanza, ha defendido.

Ventura escribió parte del relato en Escocia, donde se llevó una maleta «sin prácticamente ropa pero con muchos libros», como 'La mort i la primavera' y 'Viatges i flors' de Mercè Rodoreda, 'Mientras agonizo' de William Faulkner y 'Noches blancas' de Fiódor Dostoyevski, referencias de las que bebe 'La llei de l'hivern'.

Preguntada por si se trata de una novela autobiográfica, ha respondido que parte de las propias vivencias y que reúne detalles de su propia experiencia, aunque sobre todo recoge «pequeños pedazos cosidos de vidas de otros».

Publicar el libro es "haber ganado una lucha"

Ha confesado que escribir la novela le ha ayudado a hacer las paces consigo misma y a superar la inseguridad, y que recibir el Premi Josep Pla le da tranquilidad y acompañamiento: «Haber publicado este libro es haber ganado una lucha contra mí misma».

Para la autora, 'La llei de l'hivern' es un libro intenso en el que los sentimientos son los protagonistas: «Las personas a las que pueda interpelar es un misterio. Escribir no es un cálculo, más bien una sorpresa».