Regresan dos ejemplares de olivo a la plaza de Salamero, que estará terminada a mediados de marzo, con la asistencia de los consejeros municipales Víctor Serrano y Natalia Chueca | DANI MARCOS

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Dos de los once ejemplares de olivo han regresado este jueves a su emplazamiento original después de que en julio de 2020 se tuvieron que retirar de la plaza de Salamero tras el hundimiento de la losa superior del parking. Precisamente, las obras de reforma estarán terminadas en mes y medio, aproximadamente.

«Eran todo un símbolo de plaza y nos comprometimos a salvarlos, cuidarlos y devolverlos a la ciudad. Y esa palabra dada se cumple hoy con hechos fehacientes», ha resumido el consejero municipal de Urbanismo y Equipamientos, Víctor Serrano, quien ordena en aquel verano de hace dos años, cuando hubo que descargar y desmontar toda la plaza exterior, que se salvaran de la tala el máximo número de especies arbóreas posibles, «por respeto y compromiso con el patrimonio medioambiental y con la memoria de la ciudad».

El regreso de estos ejemplares también se ha abordado en el proceso participativo Reto Salamero que recopila un total de 508 ideas, creaciones y opiniones ciudadanas, y que se han trasladado después al diseño de la futura plaza que, ya toma forma y se acerca al final de su urbanización.

«En ese proceso participativo abierto a todos los ciudadanos, a la hora de abordar el diseño de las zonas verdes, se preguntó directamente por la vuelta de algunos ejemplares a su plaza de origen», ha recordado Serrano. «Entonces, el 73,4 por ciento de los encuestados se mostró a favor de su regreso», y ahora se da respuesta a esa petición popular y a un sentimiento general", ha apuntado.

Asimismo, el consejero municipal de Urbanismo ha explicado que la zona verde de la plaza, que pronto comenzará a tomar forma, también recoge muchas de las peticiones de los zaragozanos. «Se pidieron parterres con plantas y flores, arbustos, vegetación perimetral, vegetación trepadora, jardineras y medianas o isletas verdes», y en eso se está trabajando.

«Toda plantación en un nuevo espacio urbano --ha explicado Serrano-- requiere de un cierto tiempo para que arraigue, tome forma y desarrolle todo su potencial, pero estamos seguros de que ese espíritu acogedor y renovado se podrá ir observando desde su próxima inauguración».

Los otros 9 olivos

Los once olivos se trasladan hace dos años hasta Viveros Jara, donde han permanecido y han brotado, manteniéndose en perfectas condiciones. Dos de esos ejemplares, de unas cuatro toneladas de peso cada uno, han sido trasladados por la empresa Plantae, mediante un camión grúa, hasta la plaza de Salamero, en su esquina con la calle Cinco de Marzo, donde hay una jardinera que reposa fuera de la losa que tuvo que reconstruirse. Días atrás, esa zona ya ha sido rellenada de tierra, dejando los dos huecos donde se han plantado sendos olivos.

Ahora, quedan otros nueve ejemplares que regresarán pronto a distintas ubicaciones de la ciudad, para lo que se han comenzado a coordinar los trabajos con el Servicio de Parques y Jardines.

No obstante, la consejera municipal de Servicios Públicos, Natalia Chueca, que también ha asistido a la operación de regreso de los dos árboles, ha indicado que ya hay un tercero que tiene fijado su destino.

«Será en el parque de La Aljafería, donde próximamente se creará el Jardín de la Paz, que estará compuesto por 22 olivos de distintas variedades y procedentes de diversos rincones del mundo», ha avanzado
Chueca.

«Uno de los ejemplares que salieron en su día de esta plaza ocupará un lugar central de ese jardín, presidiendo el conjunto», ha apuntado la consejera municipal de Servicios Públicos.

En mes y medio

Por otro lado Serrano ha avanzado que en mes y medio, hacia mediados de marzo, estará terminada la plaza que será de diseño peatonal, de modo que los vehículos que entren al parking no accedan a la plaza como ocurría antes; y, además, tendrá un espacio importante para los niños con una zona de juegos infantiles «potente».

Serrano ha agradecido la «infinita paciencia» de los vecinos por unas obras que han ido en plazo, pero que se han hecho muy largas en el tiempo porque han sido unos trabajos «titánicos».