Los hechos sucedieron sobre las 23.45 horas del pasado 29 de enero cuando, sin previo aviso a los servicios de emergencia, una patrulla del Destacamento de Tráfico Valencia-A detectó un vehículo que circulaba por la AP-7, a la altura del kilómetro 532 en dirección a Alicante y en sentido contrario al estipulado para la circulación. En total, se calcula que condujo durante cuatrokilómetros en los que puso en peligro a los demás conductores.
Gracias a la rápida actuación por parte de los agentes, se consiguió dar el alto al vehículo antes de que llegara a producirse algún siniestro. Al realizar las pruebas de alcoholemia, la conductora arrojó un resultado de casi el doble de la tasa máxima permitida, al tiempo que mostraba «evidentes síntomas» de ir bajo la influencia de bebidas alcohólicas.
A la investigada se le atribuyen los delitos de conducción temeraria por circular en sentido contrario con «manifiesto desprecio para la vida de los demás» y otro por hacerlo bajo los efectos de bebidas alcohólicas.
Por ello, se enfrenta a penas que pueden alcanzar los cinco años de prisión y multa de hasta 24 meses, así como privación del derecho a conducir de hasta diez años. Las diligencias han sido entregadas en el Juzgado de Instrucción de Guardia de los de Sueca (Valencia).
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