A la espera de que se abran las urnas en mayo, los partidos valencianos han escrito su carta a los Reyes Magos con sus objetivos para 2023 y deseos que van desde el final de la guerra de Ucrania a la salud física, mental y democrática, «acciones reales» para las personas que sufren dificultades o la erradicación de la violencia machista tras un diciembre negro en España. En lo concreto, las formaciones del gobierno del Botànic apuestan por consolidar el «escudo social», mientras la oposición expresa su deseo de que sea «el año del cambio», según han detallado a Europa Press.
Entre los que integran el gobierno del Botànic, la portavoz del PSPV, Ana Domínguez, pide que llegue por fin la paz a Ucrania tras un 2022 marcado por la guerra, así como que no haya «ningún susto» a nivel sanitario ni lamentar otra pandemia o cualquier «shock». También confía en que la Comunitat Valenciana siga consolidando la senda de crecimiento y que «la gente tenga más y mejor empleo».
Pero, sobre todo, la también vicesecretaria general de Igualdad de los socialistas valencianos llama a trabajar para que no se vuelva a producir ningún otro mes de récord de víctimas mortales por violencia machista en España. «Es el mayor de nuestros deseos: que las mujeres dejen de morir asesinadas a manos de hombres», reivindica.
Por Compromís, su diputado en el Congreso y candidato a las primarias para la Presidencia de la Generalitat en las elecciones autonómicas, Joan Baldoví, desea que en junio se inicie «un nuevo gobierno del Botànic todavía más reivindicativo y social si cabe», así como que en los ayuntamientos de la Comunitat se revaliden «esas mayorías progresistas que piensan en la mayoría».
Como balance de 2022, Baldoví saca pecho de haber ayudado con su escaño en el Congreso a sacar adelante «toda una serie de medidas que han contribuido a un escudo social para que nadie quede atrás». «Estamos orgullosos», asevera apuntando a la subida de las pensiones y del salario mínimo, al freno al precio de la luz y de los carburantes o a la gratuidad del transporte público.
Desde Unides Podem coinciden en la necesidad de seguir impulsando políticas transformadoras, pero advierten que «esto implica no dar un paso atrás en todo lo conseguido» sino «ir a por más y ofrecer la mejor cobertura para los impactos que está generando la inflación en las familias más humildes y en pequeñas y medianas empresas». «Los buenos deseos solo son posibles si se trabaja duro y se hace frente a los principales problemas de la ciudadanía», reivindican.
Tras recordar que «queda mucho por hacer», apuestan por medidas que hagan frente al encarecimiento de los alquileres e hipotecas, además de blindar los servicios públicos y «seguir alzando la voz» para abordar la reforma de la financiación autonómica, la deuda histórica y el déficit de inversiones del Estado. Otros de sus deseos son profundizar en la progresividad del sistema fiscal o avanzar en una transición energética que «no se haga de espaldas a los municipios de interior».
Entre la oposición, el PPCV espera que 2023 sea «el año del cambio» de gobierno en la Generalitat, para lo que se marca como objetivo «dar una vuelta a las políticas sectarias que sufre la Comunitat desde hace ocho años». «Para que sea realidad hace falta mucho más que la ilusión y la magia de sus majestades de Oriente, se necesita voluntad y acción política ante el abandono de estos últimos años», reivindican fuentes 'populares'.
Su primer deseo es una sanidad pública «digna y que funcione», seguido por una financiación justa tras años de retrasos y de «ser ignorados por Pedro Sánchez y Ximo Puig». También reclaman el agua necesaria para regar los campos, principalmente del sur de Alicante «amenazados» por el recorte del trasvase Tajo-Segura, así como políticas sociales que den respuesta a lo que necesitan los valencianos; sin olvidar acciones reales para los que no llegan a fin de mes y una bajada de impuestos para las rentas bajas.
Salud física, mental y democrática
«Mucha salud, salud en el más amplio de los sentidos» es el principal deseo que traslada la portavoz de Ciudadanos en Les Corts, Ruth Merino, ya que señala que «salud física no es lo único que hace falta para un año próspero y feliz» y hace falta «salud mental para tener relaciones sanas y constructivas». «Fuera las relaciones destructivas y la gente tóxica de nuestras vidas», enfatiza.
Al mismo tiempo, Merino reclama un 2023 lleno de «salud democrática», lamentando que «a nivel nacional y autonómico se está desprestigiando la política y las instituciones con el manoseo continuo al poder judicial y los nuevos presuntos casos corrupción por financiación ilegal». A su juicio, una buena manera de arrancar el año sería poner en marcha en la comisión parlamentaria sobre el caso Azud, en el que se investigan presuntas 'mordidas' a cambio de adjudicaciones del Ayuntamiento de València, así como una supuesta financiación ilegal del PSPV, durante la etapa de Rita Barberá.
Y desde Vox, su síndica, Ana Vega, asegura que lo único que pueden pedir a Melchor, Gaspar y Baltasar es «una derrota electoral de la izquierda en toda España», al considerar que es una condición indispensable para que las familias puedan tener «un futuro digno y en libertad». «El mejor presente que podemos recibir son elecciones generales», afirma, y se marca como objetivo «echar a Puig y a la izquierda sectaria de las instituciones».
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