El dramaturgo portugués Tiago Rodrigues reflexiona sobre el auge global de los movimientos de ultraderecha en la obra 'Catarina e a beleza de matar fascistas', que se podrá ver en el Teatre Lliure de Montjuïc este miércoles y jueves y que había sido cancelada en la temporada 2020-2021 por las restricciones de la pandemia.
En una rueda de prensa telemática, el dramaturgo ha explicado que comenzó a pensar en la obra en 2018 con la voluntad de conectar la historia del antifascismo, la dictadura portuguesa y las luchas feministas con lo que veía todavía de «residuo institucional del fascismo, por ejemplo en la justicia con una dualidad de criterios respecto a la violencia sobre la mujer».
'Catarina o a beleza de matar fascistas' narra la historia de una familia en la que sus miembros se dedican a matar fascistas en una tradición de más de 70 años y que pone a prueba a la joven Catarina, que se debe iniciar asesinando a un juez denunciado por el movimiento feminista.
El también nuevo director del Festival de Avignon (Francia) ha explicado que el título del montaje es por Catarina Eufémia, una campesina asesinada en 1954 que reclamaba derechos laborales, y que se convirtió en un símbolo de la resistencia antifascista y de la emancipación de la mujer.
El montaje se sitúa en 2028 después de que la ultraderecha ha llegado al poder a Portugal con esta familia que celebra esta «reunión absurda» en la que matan a un fascista, pero en la que la Catarina muestra dudas y se pregunta si la violencia no es un error, originando un debate político, filosófico y humano en su familia.
Discurso final
Rodrigues ha explicado que en la pieza, que dura dos horas y media, el secuestrado no habla hasta la parte final en la que hace un «discurso de victoria» interpelando al público como si fuera un mitin político, y que ha provocado reacciones entre el público como gritos y lanzamiento de algún objeto.
El dramaturgo ha subrayado que esa escena provocó incluso una «crisis» con la compañía, ya que en un principio algunos integrantes se negaban a que se introdujera ese discurso para el que Rodrigues ha dicho que se inspiró en discursos que se pueden escuchar en parlamentos europeos, pero que finalmente se mantuvo por la incomodidad y la reflexión que generaba.
Tiago Rodrigues ha afirmado que por ahora están girando por los teatros en los que no pudo hacerlo por la pandemia y que el Lliure apostó por la obra desde un inicio, y que a partir del próximo año estará disponible para girar de nuevo.
Preguntado por la reacción en Italia tras el triunfo de Hermanos de Italia, ha dicho que representaron la obra antes de las elecciones en Roma y Módena, y que el partido ahora en el gobierno intentó que se cancelara, pero los ayuntamientos no lo apoyaron, y ha dicho que tiene invitaciones de otros teatros italianos: «Me parece importante volver a Italia el año próximo», ha dicho.
El director del Teatre Lliure, Juan Carlos Martel, que ha considerado que la obra refleja «el peso de la tradición, la familia y el fascismo», ha asegurado que le encantaría que la pieza se viera en más teatros españoles el próximo año.
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