Tras la Junta de Portavoces ha tenido lugar una reunión de la Mesa de la Asamblea donde se ha analizado el escrito de los servicios técnicos sobre la solicitud de reconsideración de Vox, tras haber registrado fuera de tiempo sus enmiendas, alegando fallos técnicos.
En el texto de los servicios informáticos, al que ha tenido acceso Europa Press, se determina que no se produjo «ningún fallo técnico, sencillamente porque no lo hubo». También añade que "en ningún momento se comunicó a la Dirección de Informática la existencia de ningún fallo o problema técnico, ni a través de la aplicación de incidencias, que devuelve al usuario un correo electrónico con la presentación de la incidencia, para que quede constancia de esta, ni a través de llamadas a la Unidad de Atención al Usuario de la Dirección de Informática.
«Si se hubiera producido un problema técnico, lo más lógico y útil hubiera sido que alguien del grupo parlamentario Vox se hubiera puesto en contacto con los servicios informáticos de la Asamblea, tanto para la resolución del problema como para poder dejar apropiada y sencilla constancia del mismo sin controversia alguna. Nada de ello se hizo el día 2 de diciembre de 2022, en contraposición con las actuaciones del mismo grupo el día precedente», determina.
Para los técnicos, «no cabe equiparar la inmovilidad de un usuario entre 'Pantallas de aplicación' o que el usuario no pase de pantallas a generación 'Informe' »con un fallo o problema técnico, como pretende hacer el grupo parlamentario Vox en su escrito".
En rueda de prensa posterior a la Junta de Portavoces, el portavoz adjunto de Vox, Íñigo Henríquez de Luna, ha avanzado que van a pedir una «auditoría externa» para que se verifique este proceso y no descartan tomar acciones legales. «Es muy raro... todas esas lagunas... esa falta de información técnica. Es algo muy grave. No es una decisión ni jurídica, ni técnica, sino política», ha lanzado.
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