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Tranvías de Zaragoza califica de «rotundamente falso» el último comunicado hecho público por el comité de empresa y desmiente las «falsedades» que pretenden sembrar dudas sobre el correcto funcionamiento de los tranvías, especialmente en un ámbito tan sensible como es la seguridad.

Tranvías de Zaragoza ha considerado una «irresponsabilidad» lanzar este tipo de "infundios que buscan alarmar, sin tener, además, ningún
fundamento real".

"La seguridad --han subrayado-- constituye un elemento básico en nuestro desarrollo profesional diario, desde la puesta en marcha del servicio en el año 2011 y se cumplen sistemáticamente todas las exigencias de seguridad vinculadas al mantenimiento de las vías y las unidades tranviarias, cuestión de la que están perfectamente al corriente en el comité de empresa.

Tranvías de Zaragoza ha lamentado profundamente la actitud «irresponsable» del comité al difundir falsedades entre la población, con un oportunismo impropio de quienes están al frente de este servicio público que solo pretende generar incertidumbre y alarma entre los usuarios.

Tranvías de Zaragoza ha recordado que el Plan de mantenimiento de la línea, sujeto también a la revisión por parte de auditores externos de los aspectos que estén relacionados con la seguridad de la operación, cumple los estándares de seguridad. Sujeto a una constante mejora de año en año, el mantenimiento de la vía se realiza sobre lo previsto en este Plan y con la frecuencia prevista en él.

Tres aspectos

Este plan Tiene tres aspectos que pasan por un mantenimiento preventivo, con un control de elementos como la alineación, la rugosidad, amolado de vías y recarga de carriles, incluyendo los desvíos. Además, se realiza una limpieza diaria y se procede también a un mantenimiento correctivo ante cualquier incidencia detectada.

Todo ello se viene desarrollando con normalidad desde hace once
años, con el mismo funcionamiento y sujeto a las mismas circunstancias que todos los tranvías del mundo.

En Tranvías de Zaragoza trabajan más de 150 personas diariamente para operar los tranvías y realizar las tareas de mantenimiento, han indicado en una nota de prensa.

La afirmación del comité es "rotundamente falsa, y producto del
desconocimiento del trabajo de otros compañeros que se dedican a
hacer segura la circulación mediante las acciones de mantenimiento y
prevención".

Como problema puntual, en un tranvía que tenía una incidencia
técnica previa, el pasado 22 de noviembre, una unidad quedó detenida en la cuesta del paseo de los Olvidados de Valdespartera y posteriormente se solventó el problema, ajeno, en todo caso, al
mantenimiento de la vía.

En cualquier caso, la empresa, manteniendo su compromiso con la
seguridad de los pasajeros y sus empleados, dispone de una consigna
para circular en condiciones climáticas adversas.

Profesionalidad

Por otro lado, la profesionalidad de los conductores incluye el
conocimiento del vehículo y la vía y por lo tanto una de sus funciones es conducir adaptándose a la situación cambiante del entorno.

El comité de empresa dice que las posibilidades de accidentes se
aumentan exponencialmente, pero según la empresa es una afirmación «falsa»; su número se mantiene con una tendencia a la baja desde el inicio de la operación y esto no ha sido por casualidad, han apostillado. Todos los años se aplican medidas prácticas para reducir y mitigar los posibles riesgos.

Tranvías de Zaragoza recibe de una manera constante visitas de
responsables técnicos y empresariales de todos los continentes, que han coincidió en señalar la muy alta calidad de la explotación. Así lo han hecho representantes de cerca de 300 ciudades y 69 países del mundo, constituyendo una referencia ejemplar de cómo puede construirse y operar día a día una línea de tranvías que es la primera de España en número de pasajeros.

La consideración de los pasajeros en la Encuesta de Satisfacción de Usuarios, que se desarrolla anualmente, lleva cinco años por encima de 8 sobre 10.

De otra aparte, sobre la denuncia del comité en los equipos de
trabajo, concretamente en la renovación de los asientos de conducción, el comité «es sabedor» ya de la orden de compra efectuada.