Visita de la delegada de Justicia de la Junta en Granada, Inmaculada Hernández, al SAVA | JUNTA

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El Servicio de Asistencia a las Víctimas de Andalucía (SAVA), que da atención integral psicológica, jurídica y social a las personas que hayan sufrido o sufran algún delito, incrementó en un 67,8 por ciento el volumen de atendidos durante el año 2021 con respecto al año anterior.

Así lo ha señalado la Junta en una nota, tras una visita a las instalaciones del SAVA en Granada de su delegada de Justicia, Administración Local y Función Pública, Inmaculada Hernández.

En un encuentro con los medios, Hernández ha destacado que el servicio prestó atención a 2.441 personas sobre las que se llevaron a cabo un total de 16.437 actuaciones en distintos ámbitos como el jurídico, social, psicológico y carácter general.

El incremento en el volumen de atención podría tener su origen en la puesta en marcha, en julio de 2020, de los equipos itinerantes del SAVA que «tratan de acercar al ámbito rural la atención personalizada a las víctimas de delitos, evitando con ello que tengan que desplazarse hasta la capital», según la delegada.

Los equipos itinerantes son atendidos por tres profesionales: una jurista, una psicóloga y una trabajadora social, que se trasladan a distintas sedes judiciales de la provincia ubicadas en Motril, Almuñécar, Guadix, Santa Fe y Loja teniendo además en agenda visitas a otros partidos judiciales como el de Órgiva, Baza y Huéscar.

En 2021 el SAVA itinerante de Granada atendió a un 571 personas, el 60 por ciento de las cuales fueron víctimas de un delito relacionado con la violencia de género. En total, se han llevado a cabo 5.600 actuaciones, siendo Motril la sede itinerante en la
que mayor volumen de personas se atendió (202) y en la que más intervenciones se realizaron, 2047, seguida de la de Santa Fe con 1.583.

La delegada ha afirmado que desde la Consejería de Justicia «se sigue apostando por este servicio» que ha calificado como «un recurso muy interesante y muy potente» al que puede acceder cualquier persona víctima que lo necesite.

Así, Hernández ha considerado «fundamental mantenerlo y darlo a conocer, para que cualquier víctima de cualquier delito que lo esté pasando mal sepa la Junta de Andalucía la ampara, la tutela, la acompaña y le da una oportunidad».

Según los datos recogidos en la memoria anual del SAVA, el perfil de las víctimas que acudieron al servicio de Granada fue el de una mujer en el 88,4 por ciento de los casos, soltera el 44,9 por ciento, desempleada el 35,6 por ciento, de nacionalidad española, un 84 por ciento, y de entre 30 y 44 años.

Sobre todo, fueron víctimas de un delito o falta relacionado con la violencia de género en el 62 por ciento de los casos atendidos y con nivel de estudios primarios en el 21,4 por ciento, aunque la mayoría no especifica este aspecto. Además en el 59,6 por ciento de los casos sufrieron «victimización continuada».

Se ha notificado, en paralelo, una disminución en el porcentaje de personas que deciden retirar la denuncia, que pasó del 14,6 en 2020 al 8,6 por ciento de 2021. El volumen de denuncias presentadas fue del 72,56 por ciento, lo que suponen 1.272, de las cuales 1.146 fueron presentadas por mujeres y 126 por hombres.

El perjuicio psicológico está detrás de 1.634 casos, el 56,5 por ciento de tramitados en el SAVA, de los que 1.446 lo sufren mujeres y 188 hombres. A éste le sigue el perjuicio físico con 844 casos, el 29 por ciento, de los que 738 son ocasionados a mujeres y 106 a hombres.

En relación a la tipología delictiva que se presenta en los casos atendidos por el SAVA la más frecuente está relacionada con las acciones delictivas que sufren las víctimas de la violencia de género. Encabeza el listado los casos en los que se sufren torturas y otros delitos contra integridad moral, un 34 por ciento, seguidos aquellos por lesiones, con un 25,8 por ciento, y por otros contra la libertad, en un 18,8 por ciento de los casos.

Una de las mayores fuentes de remisión de las víctimas que acuden al SAVA de Granada (56,25 por ciento) proceden de órganos judiciales, en concreto los Juzgados de Violencia Sobre la Mujer, seguidos de los centros municipales de información a las mujeres, «lo que demuestra la buena coordinación existentes con estos servicios en los distintos partidos judiciales de las sedes del SAVA itinerante».