El primer secretario del PSC y exministro de Sanidad, Salvador Illa, en una entrevista de Europa Press. | DAVID ZORRAKINO - EUROPA PRESS

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El primer secretario del PSC y exministro de Sanidad, Salvador Illa, defiende que, de la pandemia de Covid-19, se extraen lecciones como la puesta en valor del sistema sanitario público y universal, la industria y la ciencia: «Son muchas lecciones, pero se pueden resumir en una: la necesidad de tener instituciones fuertes y el valor de la política como servicio público».

Lo ha dicho este martes en una entrevista de Europa Press, en la que ha asegurado que su libro 'El año de la pandemia' (Ediciones Península) quiere ser una «reivindicación de las instituciones y de la política», además de un homenaje a los ciudadanos españoles y a su respuesta ante la pandemia.

El libro, con más de 300 páginas y prólogo del director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (Ccaes), Fernando Simón, repasa la gestión y vivencias de Illa al frente del Ministerio de Sanidad cuando se declaró la pandemia de Covid-19, y revisita los momentos más duros y también los positivos, como el inicio de la vacunación, que fue «el más feliz».

Illa ha explicado que ha escrito su libro desde un espíritu constructivo y con la voluntad de extraer algunos de los aprendizajes de la pandemia: «Quiere ser un homenaje a la actitud de todos los ciudadanos españoles, en particular de todo el ámbito sanitario, y una reivindicación de las instituciones y de la política».

Considera que, en el ámbito moral, el Covid ha contribuido a poner en valor la dimensión comunitaria frente al individualismo, y también a contemplar profesiones teniendo en cuenta «su valor social» y no sólo su retribución económica, como el personal de limpieza en el ámbito sanitario y los trabajadores de las cadenas de distribución alimentaria, ha dicho.

«Iremos extrayendo más lecciones. Todavía estamos en un periodo de reflexionar y de asumir lo que nos ha pasado», ha avisado el exministro y ahora jefe de la oposición en el Parlament, que ha sostenido que algunos de estos aprendizajes se están traduciendo en decisiones políticas, como el refuerzo de la salud pública.

Preguntado por si una política cortoplacista puede dificultar la puesta en práctica de estos aprendizajes, ha sostenido que «es muy difícil que no haya un reflejo con más o menos intensidad y claridad de lo que ha pasado. Esto sí que pasará, otra cosa es el ritmo al que pase», ya que hay cambios que cree que pueden producirse a más largo plazo.

Ha asegurado que no se arrepiente de ninguna de las decisiones que tomó al frente del Ministerio, porque se tomaron en base al criterio científico, teniendo en cuenta la postura de organismos internacionales y multilaterales y trabajando con las comunidades autónomas: «Actuamos como teníamos que actuar y la actuación fue más que decente, y creo que la perspectiva del tiempo también ayuda a verlo de esta forma».

Gestión de ayuso

Preguntado por la gestión de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha remarcado que ha escrito el libro de forma constructiva y que en él rememora el estado de alarma que se declaró en Madrid ante la segunda ola de Covid, y ha elogiado el comportamiento de los ciudadanos madrileños durante la pandemia.

Ha rechazado valorar las críticas que Ayuso hizo este lunes a su libro: «El discutir por discutir y señalar todo lo que va mal y generar una actitud negativa en la sociedad, y buscar la confrontación por la confrontación, a mí eso me parece que es algo más de la década pasada, y no me interesa».

«No entiendo la política de otra forma que no sea como servicio público», ha proclamado Illa, que ha descartado que se arrepienta de haber dejado su cargo en el Ministerio para liderar la candidatura del PSC a las elecciones catalanas de febrero del año pasado.

Ha asegurado estar muy ilusionado y convencido de la labor que está realizando al frente del PSC y «construyendo una alternativa en Catalunya» ante un Govern de Pere Aragonès que considera que no gobierna y que ejerce como camisa de fuerza ante las potencialidades de Catalunya.

Covid y política catalana

Preguntado por si el reto de trabajar para presidir la Generalitat es equiparable al de gestionar la pandemia, ha señalado que son cosas distintas y que tiene por objetivo servir a Catalunya: «Tengo la ambición de contribuir a mejorar Catalunya, y tenemos las ideas, el proyecto y los equipos para poderlo hacer bastante mejor de lo que lo está haciendo el Govern».

«A nivel personal, después de haber estado al frente del Ministerio durante este año, he visto todas mis expectativas personales más que superadas, por lo tanto no me mueve un afán personal de tener más o menos notoriedad o responsabilidad, porque creo que será difícil que pueda volver a tener un nivel de responsabilidad como el que tuve», ha subrayado el dirigente socialista.

Preguntado por si la pandemia ha influido en la política catalana y en el proceso independentista, ha destacado que ha sido «un baño de realismo para todos, no sólo para Catalunya», y ha avisado de que la invasión rusa a Ucrania es un segundo baño de realidad que demuestra que las soluciones pasan por trabajarlas conjuntamente.