14/09/2020 Padres y alumnos en el patio de un colegio durante el primer día del curso escolar 2020-2021, en Barcelona, Catalunya (España), a 14 de septiembre de 2020. Catalunya iniciará este lunes un curso escolar marcado por las medidas contra el coronavirus, con una previsión de 1.587.395 alumnos entre Infantil, Primaria, ESO, Bachillerato, FP, régimen especial, centros de adultos y a distancia (9.451 menos que el anterior) y la incorporación de más de 8.000 profesionales a los centros. POLITICA David Zorrakino - Europa Press | David Zorrakino - Europa Press

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Catalunya iniciará este lunes un curso escolar en el que dejará atrás las medidas por la pandemia de coronavirus, no tendrá huelgas en septiembre tras el acuerdo entre Govern y sindicatos sobre la reducción de una hora lectiva a los docentes y sin porcentajes de lenguas en las aulas tras la aprobación del decreto que fija su inaplicación.

Los centros docentes catalanes regresarán a la normalidad prepandémica sin mascarillas, grupos burbuja ni mascarillas, una situación que el conseller de Educación de la Generalitat, Josep Gonzàlez-Cambray, consideró en la rueda de prensa de inicio de curso «muy importante» desde el punto de vista emocional para el inicio de un curso que arrancará este lunes para Infantil y Primaria y el miércoles para ESO, Bachillerato y Formación Profesional.

Catalunya abrirá el curso con 1.588.733 alumnos, unos 5.000 menos que en el curso anterior, que se dividen en 1.316.477 en régimen general, que engloba Infantil, Primaria, Secundaria, Bachillerato y grados de FP; 129.936 en régimen especial, que incluye las enseñanzas de música y artes; 61.000 en formación de adultos, y 81.320 en enseñanzas a distancia.

El conseller volvió a defender el avance del inicio de curso una semana, que por primera vez será en 5 de septiembre y que tendrá jornada intensiva durante todo el mes, y aseguró que cuando acabe septiembre iniciará un proceso de evaluación con la comunidad educativa para ver qué mejoras se pueden implantar.

Este avance del inicio de curso supone una hora de ocio educativo las tardes de septiembre, y el conseller remarcó que se han firmado la práctica totalidad de los contratos para los monitores para cubrir ese horario.

Gonzàlez-Cambray también resaltó la reducción de la ratio en P3, que pasará de 25 a 20 alumnos por aula en «cerca del 90%» de las guarderías públicas, y la gratuidad de P2 para las familias en las guarderías públicas, así como el aumento de la subvención por plaza en las privadas.

El curso se pondrá en marcha con las novedades de la Escola Balàfia-Pinyana de Lleida, por la fusión de las escuelas Balàfia y Pinyana; la Escola La Vila de Polinyà (Barcelona), por la fusión de Polinyà y Pere Calders; la Escola Castellfollit del Boix, por fusión de los centros Coll de Gossem y Maians, y el Institut de Logística de Barcelona.

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También se integrarán a la red pública tres centros: el Institut Escola Projecte de Barcelona y el Instituto Escola Maria Miret de L'Hospitalet (Barcelona) --antigua Acadèmia Cultura--, ambos anteriormente concertados, y el Institut Miquel Biada de Mataró, hasta ahora municipal.

Acuerdo con los sindicatos

El curso comenzará con el acuerdo a cuatro días de su inicio entre Generalitat y sindicatos sobre la reducción de una hora lectiva a los docentes a partir de enero de 2023, que ha permitido desconvocar las huelgas que estaban previstas para el 7 y 28 de septiembre.

Este acuerdo supondrá a la Generalitat un coste de 170 millones de euros y la contratación de 1.463 maestros y 2.009 profesores y estaba supeditada a la desconvocatoria de las huelgas: las horas lectivas pasarán a ser 23 en Primaria y 18 en Secundaria.

Este pacto supondrá una tregua en las movilizaciones sindicales, que se iniciaron durante el segundo trimestre del pasado curso, tras el acuerdo que Cambray calificó de «histórico» y que las centrales afirmaron que estarán vigilantes en la negociación del resto de reivindicaciones.

Lengua

Durante la rueda de prensa, el conseller Cambray remarcó: «A partir de la semana que viene ningún aula de este país aplicará porcentajes de aprendizaje de lenguas, ningún aula aplicará el 25% de castellano».

Subrayó que, tras un curso pasado «marcado por injerencias judiciales», se hicieron cambios legislativos que implicaron la aprobación de un decreto que fija la inaplicación de porcentajes de lenguas en las aulas.

Cambray defendió que ese decreto ha sido «un éxito de país, que es lo que pasa cuando se trabaja en la misma dirección al servicio del alumno», incidió en los criterios pedagógicos para no aplicar porcentajes por lenguas, y señaló que trabajarán para incrementar el uso del catalán en los centros y la aplicación de los proyectos lingüísticos.

El departamento envió una carta a los 27 centros afectados por sentencias o medidas cautelares del 25% en la que señala que las recientes modificaciones legislativas en materia lingüística hacen que las resoluciones judiciales sean «incompatibles».