Lo ha dicho este lunes al declarar como testigo ante el titular del Juzgado de Instrucción 1 de Barcelona, que investiga estos hechos, según han explicado fuentes judiciales.
Ha considerado que los proyectiles de foam son de mayor precisión que las balas de goma, porque éstas se disparan al suelo e impactan contra la masa de personas, mientras que el foam tiene la posibilidad de apuntar a un objetivo, "pero en absoluto es una arma de precisión".
Por su parte, el abogado de la acusación particular, Xavier Muñoz, ha explicado que han pedido este testigo porque él participó como experto en la elaboración del protocolo de foam, y que con su declaración, querían obtener "criterios técnicos" sobre las balas de foam y saber por qué se pueden disparar por encima de la cintura en algunas circunstancias.
El jefe de armería ha manifestado que se puede disparar por encima de la cintura "a criterio del lanzador y solamente en circunstancias óptimas, como en un campo de tiro y en plena visibilidad", por lo que Muñoz ha asegurado que son circunstancias antagónicas a las que había durante las protestas de Pablo Hasel, donde era de noche, había fuego y mucho movimiento.
"Yo considero que quien firma el protocolo está asumiendo este riesgo de poder disparar en la cabeza", ha zanjado el abogado.
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