Enrique Ballesteros será el próximo invitado del Club Ultima Hora. | Rebecca Hale

Enrique Ballesteros dará el martes su visión del Mar Balear en el Cine Rívoli, en un acto organizado por el Club Ultima Hora, IB-3 y Marilles Fundation. El experto del CSIC pronunciará la conferencia ‘Una visión personal de Mar Balear’ y compartirá mesa redonda con su colega Enma Cebrián y con el fotógrafo y responsable de Shark Med, Agustí Torres. En el acto también se podrán ver las primeras imágenes del documental ‘Arxipélag Blau’. El aforo está completo.

¿Qué tiene de especial para usted el Mar Balear?
El Mar Balear es un pequeño trocito del Mediterránteo Occidental que, por su situación y sus presiones a lo largo de los últimos cien años, se ha mantenido en un relativo buen estado de conservacción. Este estado, hay que matizar un poco, lo es para la mayoría de los hábitats, pero no para las especies que están sujetas a una explotación comercial. En relación a peces está muy igual que el resto de costas, pero en cuanto a conservación de los hábitats está en un estado envidiable, como los de islas como Córcega y Cerdeña.

¿Se valora lo suficiente por parte de la sociedad?
Yo estoy seguro que sí. Si alguien no lo valora, le haría la siguiente pregunta: ¿Qué pasaría si pone Balears en medio de la meseta castellana? Se eliminarían todas la características de las Islas, su fuerza turística y su cultura. El mar es una parte fundamentalísima del éxito de Balears como turismo, de su cultura y su ideosincrasia. No se concibe a ningún nivel.

¿Ese reconocimiento conlleva un esfuerzo similar por su conservación?
En mi opinión, no. Ni en la de muchos científicos. No es un problema endémico de las Islas, es un problema mundial. Ni aquí, ni en ninguna parte del mundo, hasta al menos hace cinco o seis años. No se ha considerado el mar como algo que necesita protección.Este verano el mar ha alcanzado temperaturas récord.

¿Qué están detectando los científicos?
He estado buceando en todas las Islas este octubre. Lo que hemos visto es una mortalidad muy grande de organismos acogidos al fondo del mar: esponjas, corales, algas, etc. Estas altas temperaturas no son exclusivas de Balears, en Marsella, por ejemplo, estos episodios de mortandad han sido mucho peores. Nos vamos a tener que ir acostumbrando, pero es algo que no podemos controlar localmente. Balears está casi indefensa frente a este cambio global que nos va a venir con más fuerza. Lo sí que sabemos es que, cuanto más protegidos estén los ecosistemas, como el mar, y más eslabones de la cadena trófica tengan sanos, resistirán mejor el cambio climático. La sociedad tiene que aportar su grano de arena a la descarbonización en Balears, pero para conservar el mar tiene que centrarse en aquellas actividades humanas que les perjudican. Por ejemplo, la pesca, la construcción en la línea de costa o la contaminación.

¿Qué implica esa alta protección?
La gente se queda en el 30/30 (30% del espacio marino protegido en 2030). Los investigadores hemos dicho que hay que hacerlo pero en base a zonas altamente protegidas. Los líderes mundiales, como Macron, dijeron que era inasumible y se comprometieron al 30 por ciento de áreas marinas con una protección light, pero nos debemos comprometer a tener un diez por ciento altamente protegida. Es una voluntad, pero yo pienso que si Balears no cumple con ese diez por ciento de zonas altamente protegidas, primero, no está cumpliendo los criterios que marca Europa y se está echando piedras encima. Si decimos que hay que cuidar el mar porque es una seña de identidad básica, estamos haciendo un flaco favor sin cumplir.

¿Qué es necesario para alcanzar ese objetivo?
Para conseguir esto no me toca a mi decirlo. Si no se llega en estos siete o ocho años, vamos a intentar hacer lo máximo posible. Es un papel que no jugamos los científicos son decisiones a nivel político y de la sociedad.

¿Qué implica esa alta protección?
Que la pesca, tanto artesanal, deportiva o de arrastre, toda esté totalmente prohibida o muy, muy, muy limitada. Es lo que los ingleses llaman ‘no take zones’.

¿Qué zonas protegería?
Está recogido en una publicación online, Assaig sobre una primera proposta d’àrees marines. Está publicado en el boletín de la sociedad de Balears. Hay zonas que están peor, como los alrededores de la Bahía de Palma, algo obvio para cualquier persona, viendo el desarrollo que hay, respecto al norte de Menorca. Los que están en mejor condición son aquellos en los que hay menos urbanización y en las zonas en las que se pesca menos. Una zona super valiosa a nivel del Mediterráneo entero es el canal entre Mallorca y Menorca. Debía ser un parque nacional marino. Hay hábitats interesantísimos que están en un buen nivel de conservación.

¿Y de quitar la posidonia seca de las playas?
No soy un científico talibán. Yo digo que esas hojas son la manera que hay de protegerlas. En las playas en las que se saquen cada año, dentro de cien años no habrá playa.