—¿Como afronta este segundo Sant Antoni como alcalde?
—Soy más consciente que nunca de lo que representa para nuestro municipio. Cada acto, por pequeño que sea, tiene un significado profundo. Valoro especialmente el papel de la Obreria de Sant Antoni y la iglesia. La colaboración de todos los ciudadanos es esencial para que, generación tras generación, podamos seguir disfrutando de una pasión que nos une y nos define.
—El espíritu santantonier está muy arraigado. ¿Qué destacaría?
—El primer baile es, sin duda, uno de los momentos más destacados. Ha crecido muchísimo y se ha convertido en una cita imprescindible para todos.
—¿Hay novedades en el programa de este año?
—No hay grandes novedades. Es importante recordar que el año pasado incorporamos la figura de la abanderada, un acto que se celebra por segunda vez y que fue muy bien recibido. Desde el equipo de gobierno, estamos trabajando en un proyecto: la creación de un archivo fotográfico de Sant Antoni.
—¿Les preocupa la saturación de la fiesta?
—Son Servera se ha consolidado como uno de los pueblos referentes en la celebración de Sant Antoni, lo que nos lleva a dotar de un dispositivo de seguridad altamente coordinado. Cuidamos cada detalle para que la fiesta se viva con la máxima seguridad.
—¿Como invitaría al pueblo a participar de la fiesta?
—Invitaría a todo el mundo a participar de esta festividad con pasión y emoción, pero sin olvidar nunca la sensatez y el respeto por nuestro entorno. Sant Antoni es una celebración que nos une, y es fundamental que, mientras disfrutamos de ella, cuidemos lo que nos rodea para que las generaciones futuras puedan seguir viviendo esta tradición con la misma intensidad y alegría.