Prueba con los distintos sabores para refrescarte en Mallorca. | Guido Roesen

Refrescarse por dentro y por fuera es el mejor remedio para combatir el calor veraniego, por eso, te proponemos algunas ideas para elaborar tus propios refrescos caseros y paliar así las altas temperaturas.
Los zumos, los batidos o la horchata son bebidas refrescantes que aportan nutrientes y vitaminas y su oferta de sabores es, hoy en día, tan amplia que nunca nos aburriremos. Pero si te apetece, la opción casera de este tipo de refrescos es más económica y puedes preparar en grandes cantidades para toda la familia, y ni que decir tiene que trabajarás con productos frescos y de temporada. Una vez elegida la base de tu bebida, combinarla con diferentes opciones hará que, si no quieres, no repitas sabor ningún día del verano.

LA BASE

Puede ser fruta, de un tipo o varias, y mejor si son de temporada, para extraer un sabor más potenciado en tus refrescos. Con las frutas del verano encontraremos, entre otras, la sandía, el melón o los albaricoques, pero en muchas fruterías habrá también fruta de otros países como el mango o la papaya, elige un sabor o mézclalos y crea tus propias combinaciones.
Como base también se encuentran las verduras u hortalizas; las zanahorias, los tomates o el pepino son solo algunos ejemplos para elaborar una rica pócima refrescante. Y es que en la variedad está el gusto, así que incluso puedes arriesgar con frutas y verduras en una misma bebida, por ejemplo zanahoria y naranja o menta y fresas.

AÑADIMOS...

Con agua. Una vez triturados estos alimentos, añade agua para conseguir un zumo ligero, el agua no da sabor por lo que verás realzada la combinación de base que hayas elegido. Para que sea refrescante, mejor si el agua es fresca o bien, añade un par de cubitos de hielo.
Con leche. Para que tenga más cuerpo y se asemeje al batido, añade leche. Piensa que la leche desnatada es una buena forma de rebajar las calorías de la bebida.
Con hielo. Otra opción son los granizados, a tu mezcla de fruta triturada añáde hielo picado, mézclalo bien y voilà! En tus sobremesas, un delicioso granizado de café puede sustituir al tradicional.
Con helado. El helado no solo refresca si no que además está buenísimo: de chocolate con fresas, de avellanas con café, de limón con naranja... mil helados, mil frutas y mil sabores te dejarán disfrutar de un magnífico batido veraniego.

Existe la posibilidad de endulzar más estas bebidas. Si te parece que el azúcar de la fruta no es suficiente, puedes añadir azúcar, o edulcorante para contrarrestar las calorías.