Más de quince millones de turistas visitaron las Illes Balears el pasado 2016. Las Islas acogieron a más visitantes que nunca, a buen precio, y con avances en la lucha por la desestacionalización. Fueron, exactamente, 15.395.718 turistas los que llegaron a Baleares, un 10,81% más que en 2015, que también fue en aquel momento máximo histórico.
Las Islas Baleares se han visto beneficiadas por la crisis geopolítica del norte de África, los atentados en Turquía o el aún incipiente desarrollo turístico de países como Croacia. El aluvión de demandas es uno de los factores que ha provocado, además, un importante incremento de precios, que ha mejorado de forma importante los índices de rentabilidad hotelera. Además, y no es un factor menor, la importante inversión realizada en los últimos años, bajo el paraguas de la Ley de Turismo, ha llevado a la modernización de la planta hotelera, contribuyendo al incremento de la rentabilidad.
La temporada alta ha sido excelente, pero ha dejado unas secuelas que no se pueden analizar aún. Hace falta tiempo para analizar las consecuencias reales de un debate que ha situado al turismo en el punto de mira.
El problema de la masificación apareció el pasado verano con especial virulencia. Fue objeto de polémica social y política, pero no hay acuerdo sobre la mejor forma para sobreponerse a los síntomas. Nadie defiende la masificación y los hoteleros también consideran que debe evitarse. Son conscientes de que a medio y largo plazo puede ser muy perjudicial para las Islas. En todo caso, no son partidarios de limitar la entrada de turistas. Los ecologistas, en cambio, defienden restricciones que imposibiliten la masificación. Los empresarios hoteleros sí apuestan por una regulación restrictiva del alquiler vacacional, un fenómeno que ha aparecido con fuerza en el panorama turístico y al que culpabilizan de los problemas de saturación. Los cruceros son otro elemento de discordia, aunque en este punto hay práctica unanimidad en considerar que debe mejorarse la planificación para evitar que amarren en Palma seis cruceros en un día y 24 horas después no haya ninguno.
Otro elemento de debate es la proliferación de vehículos de alquiler. Un complejo problema de complicada solución, si bien no se descarta que puedan gravarse como medida coercitiva con el objetivo de reducir su número.
Illes Balears
Un total de 15.395.718 turistas llegaron a Baleares en 2016, un 10,81% más que en 2015. Fue, numéricamente, el mejor año de la historia. Los visitantes extranjeros fueron 13.011.876, un 11,92%, mientras que los españoles ascendieron a 2.282.842, un 5,12% más.
Por nacionalidades, los alemanes fueron los mayoritarios, ya que 4.584.807 llegaron a Baleares, un 5,93% más que en 2015. La cifra es especialmente relevante si consideramos que el primer mercado emisor presentaba el pasado año unos índices muy elevados. Aumentar el número de germanos sigue siendo posible, puesto que son muchos los que escogen destinos competidores, si bien no será fácil. La inestable situación geopolítica de países competidores sigue beneficiando al archipiélago balear, que continúa con un buen número de turistas prestados.
Los británicos fueron un año más el segundo mercado emisor. Llegaron a las Islas un total de 3.699.409 británicos, un 8,48% más que el año anterior. El brexit, de momento, no ha afectado al turismo británico, aunque los pronósticos apuntan que Baleares será una de las comunidades más afectadas por el retroceso en el número de visitantes. Diferentes economistas pronostican una paulatina devaluación de la libra que, junto a los elevados precios de los hoteles de Baleares, puede provocar una caída de la demanda. En este sentido, un touroperador británico de la importancia de Thomas Cook ya ha advertido de que los altos precios de Baleares suponen un problema, apostando por la recuperación de Turquía como destino masivo.
Los Países Nórdicos (Dinamarca, Finlandia, Noruega y Suecia) se han convertido ya en un mercado importante para Baleares. El pasado 2016 llegaron hasta las Islas 815.602 turistas de estos países, con un sustancial incremento interanual del 30,67%. Un total de 689.450 turistas llegaron a Baleares desde Italia, un 6,07% más que el año anterior. Desde los Países Bajos llegaron 630.232, con un espectacular incremento del 57,04%. Destaca también el turismo francés, que aportó 628.010 turistas, un 14,76% más que el año anterior.
El turismo ruso continúa su recuperación, aunque durante 2016 llegaron únicamente 75.809, un 47,03% más que en 2015.
Por meses
Julio fue el mes en el que llegaron más turistas a Baleares durante 2016 por delante de agosto. En julio arribaron a las Islas Baleares un total de 2.755.321 visitantes, un 11,04% más que en el mismo mes del año anterior. La llegada de turistas aumentó por encima del 10% en todos los meses, con la excepción de enero, agosto y septiembre. En enero llegaron a Balears 189.597 turistas, solo un 1,43% más que el año anterior. El número de españoles experimentó un retroceso del 7,96% respecto a 2015, mientras que los extranjeros crecieron un 12,22%. Aún así, llegaron solo 5.000 extranjeros más.
