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El Ajuntament de Palma y el Ministerio de Defensa han alcanzado un acuerdo para la zona de Son Busquets mediante el que se reducirá a la mitad el número de viviendas previsto inicialmente y se triplicará el espacio destinado a equipamientos.
La alcaldesa de Palma, Aina Calvo, manifestó su satisfacción por el acuerdo y recordó que ya como candidata se comprometió a reducir la edificabilidad de la zona. En concreto, se pasa de 150 viviendas por hectárea a 75; así, en lugar de 1.668 viviendas se reduce a 831, todas ellas de protección pública. Además, destacó que el proyecto inicial recibió unas 1.100 alegaciones, muchas de ellas porque se preveía que unas 5.000 personas fuesen a vivir a la zona; tras el acuerdo con el Ministerio esta cantidad se reduce a 2.500. Esto es posible gracias a que la superficie edificable se ha reducido un 17 por ciento, es decir, 31.000 metros cuadrados.
La alcaldesa destacó que el suelo destinado a equipamientos se ha triplicado, pasando de 5.900 metros cuadrados a 16.800, en los que se ubicarán equipamientos de carácter docente, deportivo, socio cultural y sanitario.
Calvo también hizo especial hincapié en la construcción de un parque de 25.000 metros cuadrados en la zona. Además, añadió que casi la mitad del suelo (100.000 metros cuadrados) serán zonas verdes (25.000 metros cuadrados) y equipamientos (17.000 metros cuadrados).
El suelo destinado a uso comercial se ha duplicado, pasando de 35.000 metros cuadrados a 70.000. La regidora d'Urbanisme, Yolanda Garví, manifestó que se trata de no hacer «polígonos de viviendas», sino zonas en las que también haya servicios.
La alcaldesa manifestó que han sido unos negociadores muy duros con Madrid, gracias a lo que, además de lo señalado con anterioridad, han conseguido que les cedan el 15 por ciento del suelo, que son unas 180 viviendas y cerca de 8.500 metros cuadrados para otros usos.
Garví ya se ha comenzado a reunir con los vecinos para explicarles el proyecto y abrirán un proceso participativo para redactar el PERI. Calvo confía en que PP y UM apoyen este proyecto que tendrá que pasar por el pleno.