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El Málaga y el Getafe dilucidarán el pase a los cuartos de final el miércoles en tierras madrileñas, tras acabar el encuentro de ida, en terreno andaluz, con 2-1, en un enfrentamiento donde los getafenses fueron mejor en la primera parte y los malacitanos en la segunda.

El equipo malagueño afrontaba los octavos de final sin conocer la victoria en esta altura de la competición. La oportunidad para salvar la barrera infernal era histórica y de clasificarse por primera vez para los cuartos, a pesar de la marcha irregular en la Liga, que le mantiene en posiciones de descenso desde hacer muchas jornadas. Sin mucha experiencia y con algunas bajas por decisión técnica y lesión de jugadores importantes como el guardameta uruguayo Gustavo Munúa y los centrocampistas Fernando, Juanito y el portugués Duda, se presentó el Málaga frente a un Getafe más experimentado y cuya competición le es familiar, por aquello de haber jugado dos finales coperas.

El Málaga con el delantero portugués Edinho, que se puede marchar en el «mercado invernal», muy incisivo, intentó desde el principio crear peligro y asustó en algunos momentos a Codina. El Getafe dominó con un juego de tiralíneas con Casquero, Pedro León, Adrián, Albín y Manu del Moral, pero el conjunto malaguista, más acertado se fue al descanso con 2-0. El conjunto getafense tuvo hasta cuatro ocasiones claras en la primera parte. Adrián por dos veces, Casquero y Pedro León, enviaron fuera sus lanzamientos por poco. El Málaga se acercó dos veces con peligro y anotó las dos.

Ya en el segundo tiempo, el Málaga que tenía en franquicia la eliminatoria, dejó escapar una buena ocasión por un error tonto y se fue al ataque. Stepanov pudo marcar el tercero pero su remate de cabeza lo sacó en la línea de gol Rafa, al igual que ocurrió con Luque, cuyo cabezazo lo despejó en el mismo punto Boateng. Al final, confrontación abierta y la solución el miércoles en el Alfonso Pérez.