Flaquer protagonizó su última rueda de prensa como político en activo. | M. À. Cañellas

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Miquel Àngel Flaquer anunció ayer que abandona la política tras la decisión del juez del 'caso Maquillaje' de retirarle el pasaporte. Flaquer deja la presidencia de UM, su cargo en el Consell de Mallorca, la ejecutiva y el Consell Polític de la formación nacionalista. El propio Flaquer ya había anunciado a sus compañeros de partido que si el juez adoptaba medidas cautelares contra él, dejaba todos los cargos. No había vuelta atrás. «Me retiro de la política. Intentaré ser feliz en otro ámbito», dijo Flaquer en una rueda de prensa celebrada anoche en la sede de UM, poco después de que el juez le comunicara al ya ex presidente nacionalista las medidas cautelares en su contra.
Flaquer aseguró que marcha «es lo mejor para Unió Mallorquina». «Ya dije el sábado en la cena de Navidad de UM que hacía falta un cambio y había que quitar carga a este partido», señaló.
La familia
El dirigente nacionalista, que seguirá como militante de base de UM y se dedicará a sus negocios hoteleros, recordó que con su decisión cumple el código ético que firmaron los partidos del Pacte hace poco más de una semana cuando los distintos gobiernos estaban a punto de romperse y Antich amenazaba con prescindir de sus socios. Flaquer comunicó su decisión irrevocable al propio Antich y a la presidenta del Consell de Mallorca, Francina Armengol.
Durante la rueda de prensa, Flaquer se acordó de su familia, que ha vivido con ansiedad todos los problemas judiciales del hasta ayer presidente de UM. «Mi familia ha sufrido mucho. Mi familia se merece un respeto y ha sufrido mucho por mi locura de estar en política».
Flaquer explicó que a partir de ahora deberá luchar para demostrar su inocencia. «Será duro, pero he actuado con honestidad y rectitud. Tendré que esforzarme para defenderme. Las cosas no están bien», comentó Flaquer.
El dirigente nacionalista agradeció la actitud de sus compañeros de partido, a los miembros de al ejecutiva, y mostró su afecto por Joan Monjo, secretario general de UM. Flaquer también se acordó de Damià Nicolau, el primer secretario general de su etapa como presidente de UM. Nicolau tuvo que dimitir y se ha dado de baja del partido. «He cumplido el código ético», subrayó.
Flaquer no quiso hablar de Nadal, de la necesidad de que el concejal de UM cumpla el código ético, y también desconoce qué futuro le espera a UM a partir de ahora. No obstante, el presidente saliente de los nacionalistas mostró su amor por el partido que ha presidido durante unos nueve meses. «UM tiene futuro», vaticinó el presidente saliente, que llamó por teléfono a todos los líderes del Pacte y a la mayor parte de sus compañeros. Al acabar la rueda de prensa, dirigentes de UM ovacionaban a Flaquer. «Será las últimas fotos que me hagáis», les decía el ya ex presidente a los periodistas gráficos en su adiós.