EFE - BÉLGICA TENIS COPA DAVIS - SPO - Tenis - CHA02. CHARLEROI (BÉLGICA), 06/03/2011.- El tenista español Rafael Nadal devuelve una bola al belga Olivier Rochus, durante el partido de la primera ronda de la Copa Davis disputado en Charleroi, Bélgica, el 6 de marzo de 2011. EFE/Virginie Lefour PROHIBIDO SU USO EN BÉLGICA BÉLGICA TENIS COPA DAVIS | Reuters

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Tres meses y 23 días, tres superficies y nueve torneos definen el tramo de la temporada que comprende el Masters 1000 de Indian Wells que alza el telón el jueves y la final de Wimbledon previa al parón estival. Tras acabar con una inactividad de 37 días desde su lesión en el Open de Australia hasta su irrupción en la Copa Davis, Rafael Nadal regresa en tierras californianas al circuito ATP, donde retoma el desafío de defender el número uno del ranking.

Nadal comanda una semana más la clasificación mundial con 12.390 puntos seguido por Roger Federer (7.965), Novak Djokovic (7.880), Robin Soderling (6.055) y Andy Murray (5.715). Su renta es de 4.425 puntos, pero el largo trecho hasta julio depara la defensa de 7.765 a lo largo de un período en el que apenas encontrara respiro.

Fiel a su discurso y manual de trabajo, Nadal solo centra sus miras en el próximo encuentro y en conseguir el tono físivo y nivel tenístico que le conceda garantías para competir en cada una de sus escalas. El mallorquín precisó 42 partidos para amontonar los 7.765 puntos que ahora debe defender ante sus principales perseguidores, cuyo margen de mejora es muy superior al que puede tener Nadal, que firmó sendas semifinales en los dos primeros Masters 1000 del curso, rubricó una temporada perfecta en la tierra y certificó su segundo éxito en Wimbledon.

A diferencia del número uno del mundo, Roger Federer defiende 1.455 puntos, Novak Djokovic 1.720, Robin Soderling 2.380 y Andy Murray 1.370. A excepción de Soderling, todos sus adversarios defienden menos puntos en nueve torneos que Nadal en Roland Garros.

Precisamente en la gira estadounidense que ahora va a dar comienzo reside una de las escasas posibilidades de engordar el casillero antes de que el circuito ATP se traslade a la tierra, donde la supremacía del manacorí resultó incontestable en 2010. El mallorquín ha incluido en su agenda el Conde de Godó, donde aspirará a los 500 puntos que se pondrán en juego. La cita en el Real Club Tenis Barcelona puede paliar posibles tropiezos, pero limitará aún más el espacio entre los torneos y la posibilidad de descansar.

El número uno del mundo prevé disputar un torneo más de los que jugó en 2010, pero lógicamente serán sus condiciones físicas y sus resultados los que determinen la agenda definitiva.