Real Mallorca: Una bala desaprovechada

El Mallorca cierra el mercado con tres salidas y el reingreso de David López y sin apuntalar una plantilla elevada en número pero que ofrece claros síntoma de debilidad

Pablo Ortells, Dani Rodríguez y Alfonso Díaz en una imagen captada con motivo de la ampliación de contrato del jugador gallego | Foto: RCDM

TW
1

La suerte está echada. Con lo que hay, a por la permanencia. El Real Mallorca ha desaprovechado la bala del mercado de invierno pese a las dudas generadas por el equipo durante este último mes y a los claros síntoma de desgaste que exhibe el grupo desde el arranque de 2025. Alfonso Díaz, CEO de negocio del club, indicó en la hora previa a la retransmisión del partido entre el Atlético y el Mallorca que los jugadores actuales son los que habían conseguido 30 puntos en la primera vuelta y por lo tanto es justo confiar en ellos.

Como idea general la razón le asiste por completo, pero no es menos cierto que las segundas vueltas no son casi nunca como las primeras y sumar es más difícil porque la presión agobia a muchos equipos tanto por arriba como por abajo. Desde el punto de vista económico el club cerró el pasado ejercicio con déficit y lo sufragó con remanente de la campaña anterior por lo que económicamente el escenario tal vez no era el más propicio para lanzarse a según qué aventuras, además, la entidad está atrapada en cesiones como la de Chiquinho, extremo portugués cedido por el Wolverhampton, y cuya penalización por romper el préstamo supera los 1,5 millones, por lo que un jugador intrascendente sigue en Palma.

Luna, al Cartagena

Ayer se conoció la cesión de Luna al Cartagena por lo que Arrasate cuenta con tres futbolistas menos ya que Llabrés y Van der Heyden también abandonaron la entidad. Ha vuelto el central David López, pero a partir de ahí no hay ningún movimiento más. Las salidas han permitido ajustar más el grupo de trabajo del entrenador sobre el césped de Son Bibiloni, pero no ha mejorado y queda una segunda vuelta muy difícil por delante. Los 30 puntos que ha sumado el equipo dan tranquilidad y es el mejor aval para afrontar lo que resta de segunda vuelta con mucha calma.

Ahora llegan dos partidos seguidos en casa que puede dejar al Mallorca con la permanencia a tiro si consigue los seis en juego. Se situaría con 36, a poco más más de 6 para dar carpetazo a la salvación, el gran objetivo del club y que es razonable que llegar a pensar que con lo que hay alcanza para conseguir la permanencia en la máxima categoría. Pero hay que ganar y hacerlo de forma a más o menos inmediata porque los rivales empiezan a apretar.

El equipo, que disfruta de dos días libres, volverá el miércoles a preparar el encuentro contra Osasuna del próximo lunes. Un encuentro sin duda especial para Arrasate, pero donde todo lo que no sea ganar será otro paso atrás y un punto negro a añadir en un inicio de año para olvidar.
El técnico tiene que enchufar de nuevo a su grupo de jugadores. y estos futbolistas tienen ahora que dar la razón al director deportivo que ha decidido no fichar en invierno porque no es necesario.