La permanencia se ha convertido en el próximo y más importante objetivo del Real Mallorca esta temporada. Eliminados de la Copa del Rey y sorteada la mala experiencia en la Supercopa, el equipo de Jagoba Arrasate centra toda su atención en atar cuanto antes la permanencia y a partir de ahí tratar de mantener la ilusión para conseguir metas más altas. Sin embargo, lo trascendental es atar la salvación, un reto que el equipo tiene a tiro de piedra toda vez que ha firmado una primera vuelta espectacular sumando treinta puntos. Faltan entre diez y doce para que esa meta fundamental quede sellada y en eso intentará centrar toda la atención el grupo mallorquinista.
El arranque de mes ha sido complicado para los baleares. Empezaron perdiendo en la Colpa ante el Pontevedra en un partido para olvidar. Era demasiado para los baleares mantener la tensión en la Liga y a las puertas de la Supercopa. No es excusa y así lo indicó Arrasate, pero lo cierto es que el fútbol exige concentración absoluta con el partido del momento y la cabeza del club, no solo de los jugadores, estaba puesta en la cita de Arabia Saudí.
Pontevedra finiquitó el sueño copero de esta temporada y el Real Madrid acabó con las ilusiones en la Supercopa de España. Lo cierto es que ni en Pasarón ni tampoco contra el equipo blanco el conjunto isleño dio su mejor versión. Ante el Pontevedra fue superado de principio a fin y en las semifinales en Arabia el Madrid fue muy superior. Resistió durante muchos minutos, pero ni fue a por el partido ni tuvo tampoco opciones. Desde el punto de vista deportivo fue una mala semifinal.
El equipo perdió mucho más tiempo entre broncas y peleas que no en centrarse en lo que verdaderamente sabe hacer bien, que es jugar al fútbol. Ahora el equipo tiene que reaccionar inmediatamente y está en una buena semana para poder trabajar con calma. Lo único positivo de haber caído en la Copa es tener libres estos días para entrenar y centrarse de nuevo en el torneo doméstico. Deportivamente Arrasate podrá recuperar a Antonio Raíllo, que pese a jugar media hora ante el Madrid, no pudo estar a su nivel ni esos minutos debido al proceso gripal que venía arrastrando.
El próximo compromiso será frente al Villarreal el lunes 20 de enero, un equipo que también cayó eliminado frente al Pontevedra, que esta temporada se ha convertido en el verdadero coco de los equipos de la máxima categoría. Los dos conjuntos llegarán por lo tanto con la semana libre para poder focalizar su punto de mira en el campeonato doméstico.
La enorme regularidad que ha logrado mantener el equipo en la primera vuelta le sitúa con esos treinta puntos que son puro oro en una temporada en la que las posiciones de descenso están también bastante fijadas porque suman muy poco los tres que están situados en el pozo de la clasificación. El Valencia, colista, no levanta cabeza y solo tiene 13 puntos. El Mallorca le saca nada más y nada menos que 17. Por encima está el Valladolid con 15 y el Espanyol con 16. Si estos equipos no varían su trayectoria el descenso puede estar muy barato esta temporada, pero aún así conviene acelerar hacia la salvación y superar la barrera de cuarenta puntos que permitirá vivir tranquilos lo que resta de temporada.
Ya han sido muchos sobresaltos este curso como para tener problemas en el torneo doméstico, que es lo que realmente interesa al club y al vestuario. Porque la permanencia es el mejor trofeo para la institución.
1 comentario
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
Sin dinero no hay esperanza de ganar algo.