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Fue el epílogo perfecto. El final soñado para un Mallorca que puso la guinda al pastel de una temporada extraordinaria. Goleó al Rayo Vallecano para alcanzar los 50 puntos y quedar dentro del top-ten del campeonato por primera vez en la última década. El desenlace del campeonato tuvo de todo: goles, estrenos, exhibiciones personales, un recuerdo a Sergio Rico en el minuto 25, varios protagonistas, alguna que otra lágrima y un pasillo a Mateu Lahoz, con ovación de la afición incluida, en su despedida como árbitro. El Mallorca fue fiel a su estilo. Pragmático atrás, creativo y peleón en la sala de máquinas y con veneno en ataque.

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El talento de Kang In Lee y la voracidad de Vedat Muriqi, que alcanzó los quince goles, fue el ABC del manual mallorquinista. El estribillo del «Kang In quédate» fue el hilo musical de la despedida virtual de un jugador que esta campaña se ha revalorizado de forma exponencial. La Liga y la Premier han llamado a la puerta y se da por hecho que el Mallorca perderá a una de sus piezas más cotizadas. Habrá que ver cómo gestionará la entidad los 20 o 25 millones de euros que podría ingresar el club balear por el futbolista coreano.

Aguirre ha pedido públicamente a Kohlberg un paso más en las aspiraciones... y si el entrenador mexicano ha firmado su renovación es porque se entiende que el Mallorca hará el esfuerzo para dar ese salto de calidad.