Diego Martínez entrenador del Espanyol durante el partido de LaLiga Santander entre el Girona FC - RCD Espanyol, este sábado en el estadio municipal de Montilivi. | David Baret

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La tensión se ha disparado en la zona baja de la Liga y en torno a la línea que marca la entrada al infierno. Amenazados por la sombra del descenso, Espanyol (27 puntos) y Valladolid (28 puntos) han decidido utilizar la carta del cambio de entrenador antes de que se les caiga la clasificación encima. En plena resaca de la jornada y tras dos dolorosas derrotas contra el Girona (2-1) y el Real Madrid (6-0), respectivamente, blanquiazules y blanquivioletas destituían a Diego Martínez y Pacheta en busca de una reacción que les aleje de la hoguera. En el caso de los pucelanos, su nuevo técnico se estrenará el próximo domingo en Zorrilla (14.00 horas) con el Mallorca como rival y testigo.

La presión por agarrarse cuanto antes al tablón de la permanencia empieza a ser asfixiante en el sótano y con los de este lunes ya se han producido siete relevos en los banquillos de Primera División. En el caso del Valladolid, que era el primero en bajar en pulgar haciendo público el despido de Pacheta, la goleada encajada en el Bernabéu y la imagen ofrecida, especialmente durante la primera mitad del encuentro, pesaban demasiado por mucho que el director del gabinete de Presidencia, David Espinar, dijera hace unos días que el club confiaba «al cien por cien» en el técnico burgalés, que se despedirá hoy de la entidad y dejará el camino libre a su sustituto. Antes de su paso por Chamartín, el Valladolid había perdido en casa contra el Athletic (1-3), pero había sumado cuatro de los seis puntos anteriores frente al Elche (1-1) y el propio Espanyol (2-1).

La destitución de Diego Martínez como entrenador del Espayol llevaba cobrando forma desde la tarde del sábado. La caída en Montilivi suponía la cuarta derrota consecutiva para los pericos, que no han sumado ningún punto desde que se cruzaron con el Mallorca el pasado 25 de febrero. Es su peor racha de resultados de toda la temporada.

Propuesta

Diego Martínez había llegado en verano a Cornellà con una propuesta valiente y un fútbol moderno, unas señas de identidad con las que había triunfado en el banquillo del Granada y un discurso que llegó rápido a la afición y a los futbolistas, pero que no ha ido acorde con los resultados: seis triunfos, nueve empates y doce derrotas. Tras consumir los dos primeros tercios de la temporada sin despegar los pies del suelo, el joven preparador gallego (42 años) no ha superado los filtros de la entidad liderada por el presidente chino Chen Yansheng, que ha decidido poner punto y final a una pretendida revolución, ahora inacabada, y esquivar otro posible descenso.

Protagonistas

El Mallorca va a ser protagonista directo de parte de estos cambios, ya que se enfrentará el domingo al nuevo Valladolid. Para los baleares no será un partido cómodo. Atraviesan por el mayor bache del curso —2 puntos de los últimos 15— y han enlazado seis derrotas consecutivas fuera de Son Moix, donde no rascan nada desde antes del Mundial. En Pucela, los de Javier Aguirre tendrán que hacer frente a esa dinámica tóxica y compensar un buen puñado de bajas ante un rival que iniciará ese mismo día un proceso de reciclaje.

No será la primera vez que el Mallorca se enfrente a un oponente con un nuevo entrenador en el área técnica. En la octava jornada, los rojinegros visitaban a un Elche que acababa de destituir a Francisco Rodríguez y que actuó ese día dirigido por Alberto Gallego (1-1).