Imagen del partido disputado entre el Málaga y el Real Mallorca. | Carlos Gil-Roig

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Desde que se implantó la Liga de los tres puntos por victoria, en la temporada 1995-96, el Real Mallorca solo ha sumado 70 puntos o más en tres ocasiones en categoría profesional. En este curso el conjunto de LGP alcanzó en la jornada 39 tras ganar al Alcorcón los 75 puntos, cifra que se verá incrementada de aquí a final de temporada. Casi nada.

La primera ocasión en la que el conjunto bermellón superó el límite de los 70 puntos fue la temporada 96-97. Tras quedarse a las puertas del ascenso en la campaña anterior, cuando finalizó el curso con 69 puntos y perdió ante el Rayo Vallecano en la promoción de ascenso, el grupo dirigido entonces por Víctor Muñoz volvió a intentarlo.

A mediados de abril y con el Mallorca liderando la categoría con tres puntos de ventaja sobre el Salamanca, tercer clasificado, el presidente Bartolomé Beltrán tomó la decisión de destituir al técnico aragonés por la línea descendente —dos puntos en las tres jornadas anteriores— del conjunto. Tomeu Llompart y Pep Bonet asumieron las riendas de un Mallorca que perdió esa privilegiada posición en ascenso directo y que volvió a jugárselo todo en la promoción y con el Rayo Vallecano de nuevo como rival.

En esta ocasión la fortuna le sonrió y un gol de Carlos Domínguez a pase de Stankovic desembocó en el ansiado retorno a la Primera División un lustro después. El retorno a la máxima categoría fue por la puerta grande. De la mano de Héctor Cúper se clasificó por primera vez en su historia para competición europea, alcanzando la final de la Recopa en su debut; fue finalista de la Copa del Rey y alzó la Supercopa de España. Con el técnico argentino, el Mallorca sumó 60 y 66 puntos respectivamente, pero la llegada de Luis Aragonés pulverizó todos los registros anteriores. Con Eto’o como figura, el Mallorca totalizó 71 puntos para acabar tercero con 8 puntos más que un Barcelona que ese curso dirigieron Serra Ferrer y posteriormente Charly Rexach.

Después de dieciséis años paseando con las estrellas, llegó la doble debacle con el descenso a Segunda y la posterior caída al abismo de la Segunda B. Vicente Moreno les rescató del pozo con 73 puntos y ahora Luis García Plaza les ha devuelto a la nobleza con una puntuación para entrar en el Libro Guinness de los récords. Este curso el Mallorca se ha destapado como un equipo letal lejos de Son Moix. Llegados a este punto el once rojillo ha conseguido superar los 33 puntos sumados lejos de Palma llegando a situarse por encima del Espanyol.

El mejor

El once de Luis García ha sido durante muchas semanas el mejor equipo a domicilio en un claro ejemplo de cómo tienen que hacerse las cosas si lo que se pretende es subir a Primera División. La gran lección que ha dado el once balear ha sido esta y si algún equipo pretende ascender en futuras temporadas ya sabe cuál es el camino.

Los números que ha ido cosechando lejos de Son Moix le han permitido por el contrario flojear en Camí dels Reis donde se han escapado puntos, pero aún así los rojillos están entre los tres primeros equipos que mejor registro ha conseguido en su propio terreno de juego. Equilibrio. Sin duda eso es lo que mejor define la trayectoria de este Real Mallorca en el campeonato nacional y el secreto que le ha permitido situarse en todo lo alto de la clasificación.

Regularidad

Pero esta exageración de números los han ido consiguiendo los futbolistas con sus actuaciones sobre el terreno de juego. Principalmente en la primera fase de la temporada Luis García Plaza tuvo que meter mano a su fondo de armario para poder sacar adelante los encuentros. Eran partidos cada tres días, choques a cara o cruz donde no había que perder la estela del Espanyol. En su primer momento el equipo de Vicente Moreno fue el gran rival de los mallorquinista el tiempo en que el grupo de Son Moix fue líder de la categoría por espacio de trece jornadas, que son muchas.

Durante este tiempo aguantó la presión del conjunto catalán, que finalmente se terminó imponiéndose y arrebatando la primera plaza para certificar antes incluso que los mallorquinistas el ascenso a la máxima categoría. Pero hay otros números que también son notables. Es el tercer equipo que más goles ha marcado y uno de los que están arriba que menos ha encajado. Es el segundo equipo con más asistencias de gol que han finalizado en las redes del rival, 33, y también el tercero más realizador dentro del área con 45 goles.

También es notable la estadística de pases buenos en campo contario 6.709, solo superado por Almería y Espanyol.

Portería a cero

El conjunto bermellón ha permanecido con la portería a cero en 22 partidos, más que el Espanyol con 20 y el Almería con 19. El Espanyol, con 173 tiros a puerta ha sido el equipo que mejores registros tiene en este concepto, seguido de Almería y Mallorca con 172 y 163.

Sin duda el estar entre los tres mejores equipos en la mayoría de estadísticas ha permitido al equipo agarrar el ascenso por la vía rápida. El Mallorca ha marcado una línea ascendente durante toda la Liga, ese ha sido el gran secreto.