Martin Valjent y Antonio Raíllo, defensas del Real Mallorca, en los campos de la ciudad deportiva Antonio Asensio. | M. À. Cañellas

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En solo unos meses y sin apenas cambiar de cromos en el álbum de la defensa, el Mallorca ha reforzado su sistema de contención. El club balear, que desde el pasado verano ha ampliado los contratos de Antonio Raíllo, Martin Valjent y Franco Russo, ha blindado con una serie de maniobras el futuro a corto y medio plazo de la zaga menos goleada de Segunda, con 21 tantos en contra tras 33 jornadas.

Desde que Pablo Ortells se subió al puente de mando y agarró el volante de la dirección de Fútbol del club, en pleno confinamiento, la línea defensiva del primer equipo es la que ha concentrado más movimientos por su parte. Especialmente en la franja central, donde el que fuera gestor del Villarreal ha ido aplicando capas de cemento a una estructura con la que ya se encontró.

El primer movimiento del Mallorca en esa dirección fue la renovación de Antonio Raíllo, un asunto que con el ex consejero delegado Maheta Molango se había ido enquistando. El central cordobés, tras Lago Junior el futbolista que más tiempo lleva en la plantilla, acordó el pasado verano una mejora y prórroga de su contrato, cuya fecha caducidad quedó entonces fijada en 2024.

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Martin Valjent y Franco Russo comparten con Raíllo la posición sobre el tapete y unos límites parecidos en el contrato. El central argentino veía premiada esta semana la evolución de los últimos meses y prolongaba en otro ejercicio su relación con el club balear en la mejor temporada desde su llegada a Palma procedente de Ontinyent. Un paso que el internacional eslovaco había dado hace un mes y medio al renovar hasta 2025. El último miembro del eje de la zaga es el serbio Aleksandar Sedlar, reclutado del fútbol polaco y firmado por la anterior dirección deportiva hasta el año 2023.

Un rincón de la defensa que Ortells reformó por completo es el lateral izquierdo, que había quedado desierto en verano tras la salida de Lumor y las malas experiencias con Baba Rahman y Koutris. El Mallorca apuntaló la zona con una apuesta importante desde el punto de vista económico como la de Braian Cufré (2024) y otra por Brian Oliván (2022).

La única pata de la defensa que se ha mantenido intacta últimamente es la del carril derecho, aunque tanto Joan Sastre (2023) como Fran Gámez (2022) tienen todavía recorrido por delante.