Xisco, con la camiseta del ATB, y Abdón, con la del Mallorca, posan para este diario antes del derbi. | Pere Bota

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Xisco Hernández Marcos (Palma, 1989) y Abdón Prats Bastidas (Artà, 1992) guardan en sus botas mucha de la pólvora que se esparcirá en las áreas de Son Malferit. El blanquiazul ya dejó en Formentera un par de gramos de caviar que levantaron el ánimo de su equipo y de su afición. Y el bermellón, pese a que todavía no ha encontrado la diana en las dos primeras jornadas, fue clave en el gol de Peralada y mejoró el panorama del Mallorca en ataque frente a la Peña. Dinamita isleña para uno de los partidos más esperados del curso.

Xisco y Abdón cargan con el fusil de sus respectivos equipos y hace unos años, cuando se alojaban en el mismo vestuario, compartieron también bautismo en la elite. Era la temporada 2011-12, ambos formaban parten de la plantilla del Mallorca B y Joaquín Caparrós, por entonces entrenador del primer equipo, les convocó para un partido de Copa del Rey frente al Sporting de Gijón. No llegaron a coincidir sobre el campo, pero los dos se fueron a casa con un dulce recuerdo que les acompañará siempre, el de su debut en las alturas. Xisco fue titular y Abdón entró en el epílogo al rescate del equipo, que acabó perdiendo por culpa de un tanto de Juan Muñiz (0-1). «Tuve el empate en el último minuto», se lamenta ahora el delantero con una sonrisa. «Pero fue bonito a pesar de la derrota. Xisco y yo estuvimos dos años juntos en el filial y la verdad es que nos entendíamos muy bien. Tiene una calidad importante y el sábado habrá que controlarlo», avisa.

Xisco se enfrentará mañana por primera vez al primer equipo del Mallorca, aunque en principio se trata de un detalle al que no le concede demasiada importancia. Ahora es el futbolista de referencia del Atlètic y solo piensa en regalarle una victoria cargada de significado a la hinchada balearica aprovechando su dulce momento de forma. «Además del Mallorca he estado en otros equipos y he jugado otras veces contra el filial. Será bonito, pero al fin y al cabo es un partido más. Pero entiendo que para nuestra afición sí será muy especial vivir un encuentro así después de tantos años por todo lo que conlleva. Los vamos a sentir muy fuerte, como siempre».