Maheta Molango y Javier Recio, durante una reciente rueda de prensa en el estadio de Son Moix. | Joan Torres

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La vida sigue igual en Son Moix... de momento. Aunque se avecinan cambios en el horizonte. La propiedad ha diseñado un plan desde Arizona que hará público en un par de semanas con la idea de adaptar el club a la nueva realidad que debe afrontar tras el descenso a Segunda B. Maheta Molango y Javier Recio siguen en sus cargos. De hecho, el consejero delegado asegura que las noticias sobre su destitución son «especulaciones sin fundamento real».... Pero el club se enfrenta a una obligada reestructuración que afectará a su plantilla de empleados y que empezará a cobrar forma a final de mes, una vez concluida oficialmente la temporada. Mientras tanto, a ras de hierba, el gran objetivo sigue siendo el fichaje de Vicente Moreno, que es el entrenador elegido para tirar del equipo en la categoría de bronce.

Maheta Molango y Javi Recio, que viajaron a Estados Unidos el pasado miércoles, regresaron este viernes mismo a Mallorca. Su viaje relámpago sirvió para que la propiedad les trasladara sus intenciones de cara al futuro más inmediato del club. En principio, tanto el consejero delegado como el director deportivo van a seguir ocupando sus cargos a pesar del descenso ya que, según Maheta, nunca han estado cuestionados, pero se revisarán sus condiciones y, como el resto de empleados, se verán afectados por los cambios previstos en el engranaje rojillo. Eso sí, tras la debacle de esta temporada su margen es mínimo. Otro fiasco encadenado agotaría sus argumentos, que además de estar oxidados tampoco cuentan con el respaldo de una afición que les continúa señalando como los culpables.

Otro de los aspectos que se confirmó durante la reunión con la nueva propiedad es que el Mallorca no podrá mantener ni el aspecto ni el nivel de vida de los últimos tiempos. El descenso supone un agujero importantísimo a todos los niveles y especialmente desde el punto de visto económico. En ese sentido, se enfrenta el Mallorca a una profunda reestructuración que sacudirá casi todas las áreas y que adaptará su tamaño como entidad al de la categoría en la que tendrá su residencia. El propio Molango ya había dejado entrever esos cambios durante la intervención ante los medios en la que realizó el balance de la temporada, aunque tampoco fue demasiado concreto al respecto. Ahora, con las ideas de la propiedad en la mano, el plan seguirá su cauce y se irá definiendo en un par de semanas. La idea es que en julio, coincidiendo prácticamente con el estreno del nuevo proyecto, el club recomponga definitivamente su figura.

Vicente Moreno es el entrenador elegido para dirigir al Mallorca en su regreso a las cavernas de la Segunda División B. El técnico valenciano, con experiencia en la categoría tras su paso por el banquillo del Nàstic de Tarragona, al que ascendió y clasificó para otra liguilla, está llamado a tomar las riendas de una plantilla que también deberá ser reformada de arriba a abajo durante estas semanas. Aunque Molango limitó el objetivo del club a «competir», la idea es salir cuanto antes del laberinto y pelear por un ascenso que entraña una dificultad enorme por el modelo de competición.

En ese sentido, la idea es anunciar lo antes posible el fichaje de Moreno y empezar a trabajar en una misma dirección, ladrillo a ladrillo, hasta llegar a la línea de salida de la nueva temporada.