La plantilla del Real Mallorca, técnicos y directivos han subido este miércoles al monasterio de Lluc para hacer la foto oficial de la temporada. | Pere Bota

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Utz Claassen mantiene la fe. El Monasteri de Lluc fue testigo este miércoles de la foto oficial del Real Mallorca para la temporada 2015-16 y de la confianza que el presidente mantiene en los suyos a pesar del irregular inicio de curso.

El alemán, muy satisfecho por la acogida recibida en Lluc y por la iniciativa del club, no oculta que preferiría un casillero más boyante, pero también observa el crecimiento que ha experimentado el equipo y concede margen al grupo para afianzar su plan.

El máximo accionista de la SAD balear calificó como «especial, excepcional, emocionante e impresionante» la visita a Lluc, donde agradeció las palabras el prior y se deshizo en elogios hacia los Blauets. «Espíritu, religión, deporte, sociedad... lo de hoy es único y un momento en el que se ve que Mallorca es una Isla única y fenomenal y que el Mallorca tiene el privilegio de desarrollar su proyecto en un ambiente único en este mundo», subrayó Claassen, que se comprometió a subir a pie a Lluc la semana que viene si el equipo ganaba por cinco goles y a hacerlo tres veces si se conseguía el ascenso a Primera.

Margen

Utz Claassen no se mostró preocupado por la situación clasificatoria del Real Mallorca y precisó que «siempre he dicho que los cinco partido iniciales iban a ser difíciles porque es normal que con 15 jugadores nuevos se tarde un poco de tiempo hasta que todo funcione bien».

«Se podría argumentar que un cambio total o radical necesita dos o tres años y nosotros lo intentamos en uno con 15 jugadores nuevos. Hay que ser justo y dar al entrenador y jugadores unas semanas para desarrollar la comunicación y la coordinación de todos los detalles. No estoy feliz con la clasificación que tenemos, me gustaría tener diez puntos en lugar de cuatro», analizó Claassen.