El atacante belga Marvin Ogunjimi observa a Llorenç Serra Ferrer en el estadio de Son Moix, durante la rueda de prensa de su presentación como futbolista del Mallorca.

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La hoguera del caso Ogunjimi sigue humeando. La prevista salida del delantero del Mallorca, frustrada durante el lunes después de que los consejeros del club se negaran a abonar la comisión de 30.000 euros que pretendía pagar Toni Prats a un abogado holandés ha amplificado el malestar del delantero, que continúa sin comprender casi nada de lo que ocurre a su alrededor. El belga, que pretendía desligarse definitivamente del club balear -tiene contrato hasta el 30 de junio de 2015- para firmar con el Strømsgodset antes de que se cerrara el plazo de fichajes de la recién inaugurada liga noruega, expuso ayer su versión de los hechos y metió el dedo en la llaga. En declaraciones a IB3 Televisió, el punta aseguró que pretendía extinguir su relación sin coste alguno y que alguien, de la entidad o su entorno, ha intentado sacar un beneficio económico de la operación. Básicamente, porque el letrado que debía recibir la bonificación reclamada por el director deportivo «es amigo de un director (directivo) del Mallorca». Mientras tanto, el órgano de gobierno de la SAD ha sido convocado con carácter de urgencia y tiene previsto reunirse mañana mismo en el estadio para abordar el caso durante un encuentro para el que también han sido citados tanto el jugador como el director deportivo.

DESENCUENTRO
Ogunjimi afirma que le ofreció al club una rescisión sin coste

«Nosotros queremos rescindir el contrato gratuitamente, no queremos dinero», aseguraba a la televisión autonómica Ogunjimi, que horas después del surrealista episodio de su abortada salida del Mallorca seguía estupefacto. El futbolista, sin equipo desde que el OH Leuven adelantara el final de su cesión por bajo rendimiento, llevaba semanas probando con el Strømsgodset noruego, en el que pretendía enrolarse aprovechando el inicio del campeonato noruego. Sin embargo, el club nórdico solo estaba dispuesto a asumir su fichaje si llegaba con la carta de libertad bajo el brazo, un requisito aparentemente asequible teniendo en cuenta que además de no haber aportado casi nada desde que se consumó su fichaje (verano de 2011), se aseguró una ficha que ronda el millón de euros por temporada hasta junio de 2015. No obstante, la comisión de 30.000 euros reclamada por Prats, teóricamente para un abogado holandés que ha intervenido en la operación, obligó a los consejeros a echar el freno de mano de manera brusca.

PROPUESTA
El jugador, comprensivo con los problemas económicos del club

Ogunjimi es plenamente consciente de que en su día rubricó un contrato privilegiado. Por eso, ofreció una salida aparentemente satisfactoria para todas las partes. «Si se rescinde el contrato es mejor para mí porque quiero jugar en Noruega, y para el Mallorca también porque mi contrato es de los más altos y ellos tienen problemas de dinero. Para los dos era la mejor solución», argumenta el atacante belga.

BONIFICACIÓN
El abogado está relacionado con algún directivo del club rojillo

Ogunjimi ofreció su película de la famosa jornada. «A las tres, me llama Damon Mark y me dice que todo está cerca de acabar bien y le digo que OK, que muy bien. Dos horas más tarde me dice que 'ah, no quieren firmar el contrato, rescindir el contrato'», destacaba antes de alertar sobre un vínculo con el destinatario de la comisión: «El holandés es un amigo de un director del Mallorca, no sé qué director». El belga, también señaló que si no vuelve es porque se lo ha pedido el club. «No hay problema para mí, pero el Mallorca me dice que no quiere que vuelva ni ahora ni en julio porque mi contrato es de los más altos y quiere una solución. Pero tuvieron una y dijeron que no».

MÁS MADERA
El órgano de gobierno se reúne mañana con carácter de urgencia

En un intento de aportar luz al tema, el consejo se reunirá mañana con carácter de urgencia. El cónclave contará además con dos invitados de lujo, Marvin Ogunjimi y Toni Prats, que han sido convocados para exponer su versión de los hechos. Se prevé otro encuentro de alto voltaje.