SABADELL - PARTIDO DE LIGA DISPUTADO ENTRE EL SABADELL Y EL REAL MALLORCA 4-0. | ultimahora.es

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Siguiendo las huellas de una crisis que no acaba nunca, la discusión que se libra en torno a la portería del Mallorca también parece infinita. Epicentro de la polémica desde las últimas cucharadas del curso pasado, el marco bermellón concentra de nuevo la atracción de los focos, más que nada, por las dudas acerca de quién será su próximo inquilino. De hecho, esa será la primera gran decisión que tome Carreras, que creía haber resuelto el enigma un par de días después de su llegada al banquillo balear. Al aterrizar, el técnico de Sant Pol recogió el hilo que soltó José Luis Oltra y oficializó su apuesta por la veteranía del internacional israelí, que ante el Barcelona B se ponía los guantes por quinta vez esta temporada. Sin embargo, su prematura expulsión y la actuación de Rubén Miño en Zaragoza lo han vuelto a enredar todo. A partir de hoy ambos pondrán el contador a cero en Son Bibiloni y será el entrenador quién decida cómo blinda su puerta. Se admiten apuestas.

La elección de Carreras, además de resultar incómoda, podría tener un efecto decisivo en la marcha del Mallorca, que también se asoma ahora al sector más comprometido de la campaña. «No soy de cambiar al portero, porque creo que necesitan estabilidad, saberse titulares», afirmaba el entrenador la semana pasada, durante una entrevista concedida a este diario. «Contra el Barça B me decidí por Dudu por la situación, el rival... No salió bien y la confianza en Zaragoza la tendrá Rubén. Luego ya será mi decisión, pero sin tener en cuenta lo que pase en La Romareda porque sería injusto», explicaba entonces. Seguramente en aquel momento ya tendría claro quién se pondría bajo el larguero tras volver de la capital del Ebro, pero las reivindicaciones de Miño, que rescató un punto vital deteniendo un penalti y que antes ya había cosido otra batería de intervenciones fundamentales, seguramente le obligan a replantearse de nuevo todos sus movimientos.

De momento, si algo le ha faltado a la portería del Mallorca es estabilidad. A su falta de seguridad (el equipo es el segundo más goleado de la competición, solo superado por el Hércules) se le ha sumado una ausencia de equilibrio que por momentos ha convertido una de las posiciones más delicadas del campo en un polvorín. En cualquier caso, la discusión se inició sobre la misma línea de gol, durante un prólogo de campaña que estuvo a punto de llevarse por delante al proyecto entero.

En un principio, Oltra se mostró partidario de respetar la jerarquía del grupo, que ya estaba bajo sospecha por culpa de la sangría defensiva del ejercicio anterior, culminada con el descenso. Aouate había prorrogado su relación con el club y permaneció sobre el campo No obstante, las goleadas ante Sabadell, Murcia y Sporting (11 tantos en tres partidos) hicieron que el valenciano, aprovechando una baja del hebreo para jugar con su selección, cambiara de rumbo y le diera los galones a Miño, que pese a tener continuidad tampoco ha encontrado la regularidad necesaria para despejar interrogantes. Ya con el agua al cuello en sus últimas citas, el propio Oltra reabrió el debate rescatando a Aouate en Anduva, en plena función final.

En total, Miño ha participado en 25 encuentros y aunque su rendimiento fluctúa su media de goles encajados (1,32 por partido) sigue siendo mejor que la de Aouate (2,2). Carreras emitirá el domingo su sentencia.