Javi Márquez protesta una decisión arbitral junto a Víctor Casadesús y Antonio Luna. | Redacción Digital

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La plantilla del Mallorca ha vuelto a destapar el tarro del entusiasmo. Pese a que el revolcón frente al Deportivo dañó su línea de flotación y ha cercenado las opciones de supervivencia del equipo, el grupo no cierra la puerta a otra victoria histórica. Con el Barcelona más pendiente de la enfermería y de su futuro europeo que del desenlace de la Liga, el vestuario es consciente de que contará con más balas de las previstas inicialmente en su visita al Camp Nou. Se trata de aprovecharlas.

El último encargado de subrayar la presencia del Mallorca en el coliseo azulgrana es Javi Márquez. El centrocampista catalán, criado futbolísticamente en la acera perica de la Ciudad Condal, considera que sin Messi sobre el tapete el radio de acción balear se duplica. «Es el mejor futbolista del mundo y que no esté es bueno para nosotros», exclama. «El problema es que si no juega Leo, lo hará otro futbolista con mucho nivel. Tenemos que estar muy centrados y aprovechar nuestras ocasiones, que las tendremos. Seguro».

Sin regalos

Para el mediocentro, que podría regresar al once en función del plan de asalto por el que se decida Manzano, no hay que descartar nada de cara al encuentro del sábado. «Sabemos que es un campo muy difícil, pero ni mucho menos vamos a ir allí a especular ni a dar por perdido el partido», insistía. «Nos estamos jugando muchísimo, y estamos encabronados con nosotros mismos porque venimos de dar una imagen que no queríamos y, sobre todo, de no ganar, que es lo que pretendíamos. Ahora vamos al Camp Nou a sacar algo positivo con lo que podamos recortar esa distancia. Nada es imposible. Vamos a ir allí a hacer un buen partido, no vamos a regalar nada», sentenciaba el exespanyolista.

En cualquier caso, Javi Márquez tampoco esconde que el paso atrás del último fin de semana supuso un duro golpe a las aspiraciones del Mallorca. «La derrota fue difícil de asimilar, pero hay que pasar página. No tenemos tiempo para lamentarnos. Ahora viene un partido muy difícil y bonito a la vez para poder conseguir algo y coger otra vez esa confianza que todos tenemos y que necesitamos después de dos derrotas. Hay que aprender sobre todo. Y tratar de que en esta semana y en las otras ocho jornadas que nos quedan no nos vuelva a suceder lo que pasó contra el Deportivo», resaltaba.

Mientras tanto, en Barcelona empezaban a mirar ayer de reojo al partido. Los jugadores que actuaron como titulares en el partido ante el PSG francés (2-2) llevaban a cabo un entrenamiento de recuperación en el que las principales ausencias eran las de los lesionados Mascherano y Messi. El hecho de que la visita del Mallorca quede encerrado entre dos de los partidos más importantes del curso para el cuadro azulgrana va a propiciar que Tito Vilanova apenas tenga tiempo de fijarse en la formación isleña.

En la sesión matutina en la ciudad deportiva, con los titulares haciendo trabajo suave, el técnico culé contaba además con los jugadores del filial Oier Olazábal, Gerard Deulofeu, Sergi Roberto y Marc Muniesa para completar el grupo y no se descarta que alguno de ella sea convocado para el sábado.

El Mallorca, que a lo largo de su historia ha sumado tres victorias en territorio azulgrana, todas ellas tras el último regreso a Primera, recibió un severo correctivo la temporada pasada (5-0) y no gana allí desde la penúltima jornada de la campaña 2007-08, también con Manzano sobre el puente de mando. Desde entonces, solo un empate forzado por un cabezazo de Nsue ha amortiguado los golpes del Camp Nou.