El israelí, en la ciudad deportiva. g Fotos: TERESA AYUGA

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Aunque se esfuerza en pasar desapercibido, los focos de Son Moix llevan tiempo apuntándole. Convertido en la principal garantía del Mallorca en su fulgurante despegue, Tomer Hemed (Haifa, 1987) se ha presentado al resto de la Liga tomando asiento junto a los principales artilleros del fútbol europeo. Con cuatro goles en el mismo número de jornadas, el delantero israelí con pasaporte polaco (su madre nació allí) se desmarca de las estadísticas individuales para centrarse en la buena marcha del grupo. «Me da igual quién marque el domingo mientras ganemos al Valencia», anuncia. Tímido y cauto en su discurso, prefiere no obsesionarse con quimeras. Sin embargo, admite que un sueño ilumina su horizonte: disputar alguna competición europea vestido de rojo.

—Su segundo año en España y le ha bastado con muy poco para exponer su versión más brillante.

—He tenido un comienzo muy bueno, como el resto del equipo. Personalmente me siento muy feliz cuando ayudo y marco goles, pero es mi trabajo. Jugando lo doy todo por el Mallorca y estoy satisfecho de que, por el momento, las cosas nos vayan tan bien, tanto a mí como al grupo. Espero que sea una gran temporada.

—Es usted el mejor jugador del mejor Mallorca de los últimos tiempos. ¿Lo esperaba?

—Creo que estoy jugando bien porque el resto del equipo también lo hace, y no al revés. El míster y el resto del cuerpo técnico han hecho del Mallorca un gran conjunto, muy duro, que cree que es capaz de ganar cualquier partido. Han conseguido que todos mejoremos y están sacando lo mejor de cada uno de nosotros. Todos estamos actuando muy bien, no sólo Hemed.

—Ha marcado ya la mitad de goles que la temporada pasada. ¿Qué ha cambiado?

—La temporada pasada era especial, porque era mi primer año en España y nada era fácil. Cambiaba de país, no tenía a mi familia, el problema del idioma... Todo era muy complicado. Ahora he llegado con más confianza, conozco mejor a la gente, voy mejorando con el español y todos esos factores han ido despareciendo.Y sigo trabajando muy duro en cada entreno, claro.

—Tener a su lado Aouate habrá sido determinante en ese sentido.

—Cuando vine comprendí lo importante que es Dudu para este club y lo que le quiere la gente al ver cómo corean su nombre en cada partido. Es una buena persona y me ha ayudado muchísimo. Lleva diez años en España, me ha echado una mano siempre que lo he necesitado y al margen del fútbol es un gran amigo. Es un grandísimo punto de apoyo.

—¿Qué siente al abrir los periódicos y ver su nombre junto a los de Messi o Falcao?

—Es muy bonito. En Israel la gente y la prensa están hablando muy bien de mí y los compañeros de la selección están muy contentos. También es un orgullo para mi familia que me esté funcionando todo tan bien. Pero prefiero no pensar demasiado. Hay un montón de cosas en las que tengo que mejorar y me preocupo de eso. Quiero que todos juntos hagamos una buena campaña y estoy convencido de que podemos mejorar lo del curso pasado.

—¿En el vestuario se habla de optar a algo más que la salvación?

—El final de la temporada pasada nos puso en el límite de dónde podíamos estar. Pero esto acaba de empezar y debemos concentrarnos en sumar cada partido. Espero que en la segunda vuelta estemos bien situados y que podamos pensar ya en otras cosas. Pero ahora todo eso está demasiado lejos.

—¿Qué opina de los que dicen que el juego del Mallorca, pese a su efectividad, es aburrido?

—Lo más importante es que consigamos puntos, porque a veces puedes jugar muy bien y marcharte de vacío. Sumar, y más ahora. Seguro que con el tiempo jugaremos mejor y todo el mundo se lo pasará bien.

—¿Le sorprende la poca gente que está acudiendo a Son Moix?

—Todos queremos que venga mucha gente, sobre todo ahora que pueden disfrutar. Para nosotros sería importante que vinieran y espero que cada vez lo hagan más, empezando por el domingo contra el Valencia.

—¿Cuál es su próximo a nivel personal? ¿Tiene algún sueño?

—Lo principal es que acabemos lo más arriba posible. A nivel personal trataré de ser una pieza importante, jugar más que el año pasado y marcar más goles. Sé que no será sencillo, pero necesito pogresar, no parar de trabajar y acabar la temporada como la he empezado. ¿Un sueño? Sí, jugar en Europa con el Mallorca.

—Se ha estado hablando todo el verano de la búsqueda de un delantero. ¿Qué pensaba?

—Entendía que iba a venir y siempre he dicho que la competencia es buena para cualquier equipo, también ahora. También lo será para mí y para que siga evolucionando, para que me concentre en ser cada día mejor y para pelear por un sitio en el once. Me vendrá bien que haya otro atacante y sé que si hago bien mi trabajo acabaré jugando.

—Víctor Casadesús siempre ha hablado muy bien de usted y ahora se ha erigido en su mejor socio.

—En el equipo hay una atmósfera muy agradable y es como una familia. En un año Víctor y yo nos hemos ido conociendo y formamos una buena conexión. Más que competir nos gusta ayudarnos el uno al otro. Fuera del campo somos buenos amigos y eso también se nota. Es muy bueno y tiene mucha calidad.

—Ahora tienen también a Giovani Dos Santos. ¿Qué va a aportar?

—Todo el mundo sabe que también tiene muchísima calidad. Será importante y aumentará nuestros recursos. Es el típico jugador que a todo el mundo le gusta ver.

—¿El domingo les espera el partido más difícil hasta ahora?

—Cada jornada es complicada pero si jugamos como lo hacemos últimamente podemos ganar. No digo que vaya a ser fácil, pero si mantenemos la línea actual podemos hacerlo.