Los jugadores de Joaquín Caparrós posan junto a un grupo de pequeños ingresados en la zona infantil de Son Espases. | M. À. Cañellas

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La pimera plantilla del Real Mallorca visitó ayer a los niños hospitalizados de Son Espases cumpliendo con la tradición y entregaron regalos a los niños que están ingresados. Camisetas, packs escolares y balones fueron lo presentes que entregaron los futbolistas y que hicieron las delicias de los pequeños que recibieron los regalos de manos de sus ídolos.

La visita empezó en la planta de Pediatría de Son Espases, donde la comitiva compartió unos minutos con los niños habitación por habitación. Los jóvenes pacientes recibieron con mucha alegría la visita del grupo. El acto finalizó en la sede de la asociación de padres de niños con cáncer, Aspanob, donde cuerpo técnico y jugadores también entregaron muchos regalos.